El sector fintech viene poco a poco tomando mayor posición en el mercado peruano, sobre todo después de un proceso de pandemia en el que muchas personas tuvieron la necesidad de digitalizar sus procesos.
Infomercado conversó con Susan Raczy, country manager de Prex Perú y especialista con más de 14 años de experiencia en banca y temas fintech para conocer más sobre cómo se encuentra este sector en el Perú y Latinoamérica.
¿Qué es Prex?
Es una app de servicios financieros digitales, que buscan democratizar el acceso a productos y servicios financieros e innovadores de calidad a nivel Latam, a través de una cuenta bimoneda, en soles y dólares, con una tarjeta MasterCard internacional prepago física y virtual. La app permite realizar compras físicas y en línea, transferir dinero entre usuarios Prex, cambiar de soles a dólares, prestamos personales instantáneos, remesas y la posibilidad de invertir en criptomonedas desde la app.
Actualmente han incorporado como accionista al Banco Itaú, la asociación financiera mas importante de Latam, quien ha adquirido el 30% de las acciones de Prex. Esto permitirá potenciar y agilizar muchos de sus planes de crecimiento en Perú, dado que se trata de un mercado clave donde nuestros productos pueden mejorar la vida de muchas personas.
¿Cómo se encuentra el sector Fintech en Latam y en Perú?
Es un sector en mucho crecimiento, en diferentes estadios de vida en Latam. Prex nació en 2015 en Uruguay, pasó en 2019 en Argentina y tiene un año en Perú en una coyuntura en donde el ecosistema Fintech está en franco desarrollo, lo cual nos ha permitido ver la oportunidad y liderar toda esta etapa de inclusión financiera digital.
En Perú a diferencia de Uruguay y Argentina, nos hemos encontrado con algunos retos, pero que la pandemia ayudó a sobrepasar, como el tema de la digitalización.
Perú es el país donde aproximadamente más del 50% de las personas son no bancarizadas o sudbancarizadas, no tienen acceso a productos financieros de calidad, por eso buscamos trabajar mucho en Prex para ayudar a construir historial de créditos e ir promoviendo la inclusión financiera en la región.
Buscamos acomodarnos a la realidad de cada país y potenciar las oportunidades o nivelar temas de vanguardia en cada país. Por ejemplo, el mundo de las criptomonedas en Uruguay y Argentina tiene otro nivel, son un poco más abiertos en la regulación, acá aún no se ha mencionado mucho el tema, pero nos encanta tocarlo.
Por otro lado, es importante la educación financiera. El peruano ha tenido que cambiar y buscar la digitalización en su día a día y se ve en el crecimiento y explosión en todos los comercios que tuvieron que convertirse rápidamente para estar a la talla de procesos de compra digitales. Nosotros ya teníamos todo sobre finanzas digitales, solo era más subirnos a la ola y ofrecerles productos diferenciadores con valor agregado.
¿Cómo involucrarán las criptomonedas en Perú?
Es un tema bien interesante, es importante abordarlo con claridad, transparencia, seguridad y sencillez. Tenemos como aliado a un custodio certificado global de criptomonedas y tenemos el producto como en circuito cerrado, lo que le asegura al cliente a tener siempre las transparencias de sus fondos, pues se las compra y vende al custodio aliado y funciona de manera lineal y trasparente.
Buscamos siempre hacerlo de la manera más transparente, por las experiencias y aprendizajes de otros países, donde buscamos facilitar que el cliente que es a fin a la tecnología e innovación se sienta satisfecho al entrar al aplicativo de Prex y encuentre productos tradicionales muy importantes como préstamos y remesas, hasta la criptomonedas que son un producto más en vanguardia.
Se pretende mucho orientar para que el cliente sea el que al final toma la decisión correcta o que le acomode. Va un poco con nuestra visión, acompañar y educar al cliente y que entienda como llevar de la mejor manera sus inversiones.
¿Cómo ha sido el proceso de adquisición de acciones por el Banco Itaú y que beneficios traerá?
Itaú, nos ha visto coma aliados y brazo extendido de ellos para que seamos ese alcance a cierta población que hace mas sentido llegar a través nuestro.
El proceso se llevó de manera global regional, prácticamente en Uruguay. Estoy alineada con que lo que justamente se busca es mantener la agilidad, el dinamismo de una Fintech, lo que también le encanto a Itaú, por lo tanto pretende continuar con las buenas practicas y la buena agilidad que se viene teniendo.
Aporta un montón, experiencia, inyección de capital, economías de escala, relacionamientos y ecosistemas, por sobre todo al cliente que es el centro de nuestras decisiones.
¿Qué resultados esperan obtener?
Nos comprometemos a trabajar con Itaú en la línea de transformación digital financiera y bancaria.
Con esta inyección lo que se busca es cumplir todas nuestras metas y proyecciones, de hecho hemos llegado a nuestra meta de 100 mil clientes en nuestros primer año, buscamos cerrar el año con 350 mil,
Con estas proyecciones ambiciones, está claro que no podrían venir sino están acompañados de una propuesta de valor fuerte, que vamos a ir desplegando en corto plazo, ya se han sentido alguna de ellas, como préstamos o cripto, es el AND de Prex.
Creemos que Prex revolucionará el mercado peruano, no solo desde la óptica de la inclusión financiera sino también haciendo mucho hincapié en la educación financiera, porque podemos tener muchos productos potentes y buenos, pero si no los llevamos de la mano y orientando al cliente para que se monten sobre ellos y su experiencia sea la correcta, creo que mal haríamos.
Se viene temas de QR, de ampliar más toda operativa de pagos transfronterizos, interoperabilidad, que es algo que en el país aun toca evangelizar, pero interesante poder tener libertad de interactuar con instituciones financieras.
¿Cuáles son las tendencias que han identificado en el sector Fintech?
Si bien Prex es agnóstico al segmento, buscamos llegar a toda la población, sabemos que al momento de perfilar el usuario para identificar hacia donde debería ir la Fintech, debemos identificar el perfil del consumidor.
Se trata de la persona que esta entendida en el mundo digital sin fronteras en sus transacciones y muestra un ávido interés por productos financieros quizá un poco más sofisticados pero que deben llegar a ser tan sencillos como querer comprar una galleta.
Cuando uno habla a veces de préstamos de remesas o de criptos, piensas que están hablando de finanzas para expertos y no es así. Eso es justo uno de los temas que vemos, hay curiosidad, hay intención en el mercado, lo que hay que hacer es orientar, transformarlo en una comunicación y un mensaje entendible y sencillo.
La idea es que sea transparente en todo el proceso y eso se busca ya sea para los productos tradicionales o innovadores, por ello venimos educando desde todas nuestras aristas en los productos.
Estamos siempre atentos y alertas a cosas tan cotidianas como el uso de plástico y en que va usando el cliente la tarjeta virtual y la física, hay un mercado para ambos.
El peruano aun necesita tener el plástico en la mano para proceder con algunas transacciones financieras, es cierto que hay buenos consumos por plástico, no obstante, el mundo de la tarjeta virtual ha venido tomando espacio, pero aún no es protagónico, esto gracias al consumo online que trajo la pandemia. Encontramos e-commerce, dispuestos a afrontar diferentes retos y desafíos.
¿Cuáles son las expectativas para los próximos años y a que nuevos mercados apuntan?
Al buscar ser considerados un facilitador financiero de Latam, es verdad que el apetito de crecimiento no para, seguimos llevando a cabo nuestro plan de expansión 2022 y 2023, desembarcando el próximo año en dos nuevos mercados, el más pronto es Chile.
A nivel interno, hemos excedido los planes de contratación de personal, vamos por un número bastante bonito que viene multiplicándose, estamos bordeando ya los 250 colaboradores que transversalmente atienden a los 3 países, también tenemos colaboradores alocados en Perú y la idea es que este número se siga multiplicando y que vayamos madurando más en cada país, según la coyuntura de cada uno.