Luego de un año de plazo para subsanar deficiencias, la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu) denegó la licencia institucional a la Universidad de Lambayeque (UDL).
Sunedu verificó que dicha universidad no cumple con las condiciones establecidas en la Ley Universitaria.
Como consecuencia de esta decisión, la UDL queda inmediatamente impedida de convocar procesos de admisión o admitir estudiantes bajo cualquier modalidad.
Asimismo, deberá ofrecer a sus estudiantes alternativas para que puedan continuar sus estudios en otras casas de estudio.
En un plazo máximo de dos años, deberá dejar de prestar el servicio educativo universitario de manera definitiva.
La evaluación realizada a la UDL arrojó indicadores observados para todas las Condiciones Básicas de Calidad, establecidas por ley.
Las deficiencias más graves están relacionadas con la investigación, los mecanismos de mediación e inserción laboral, los servicios educacionales complementarios e infraestructura.
Errores que UDL no subsanó
Sunedu verificó que la universidad incumplía sistemáticamente sus propias metas y no había implementado planes de calidad, de incentivo a la investigación y de seguridad.
En cuanto a infraestructura, Sunedu corroboró que la universidad no contaba con instalaciones seguras.
Sus laboratorios multifuncionales no cumplen con algunos estándares establecidos en sus propios protocolos.
Por otro lado, la universidad no cuenta con los laboratorios y el equipamiento necesario para los programas que ofrece.
De igual modo, la UDL no demostró la existencia de un órgano de investigación institucionalizado, ni el desarrollo efectivo de líneas de investigación.
Finalmente, los servicios médicos, psicopedagógico, social, deportivo y cultural no cumplen con los estándares mínimos.
Una universidad con fines de lucro
La Universidad de Lambayeque tiene un carácter societario; es decir, tiene fines de lucro.
Su dueño es el excongresista Virgilio Acuña Peralta, hermano de César Acuña Peralta, dueño de la Universidad César Vallejo.
Esta universidad es la primera fuera de Lima a quien ha sido denegada el licenciamiento.
Actualmente atiende a 646 estudiantes, quienes se verán perjudicados por esta medida; en especial, los que se encuentran en primeros años, pues deberán buscar otra institución para completar sus estudios.
La UDL podrá otorgar grados y títulos por un plazo máximo de 24 meses adicionales contados a partir de la fecha de cese definitivo del servicio educativo.
Los egresados que no hayan obtenido el grado o título en dicho plazo podrán solicitar su traslado, matrícula y/o convalidación de estudios en otra universidad que cuente con una carrera similar, con el objetivo de retomar los procesos de graduación y titulación correspondientes.