Los sectores más afectados en el sur a causa de las protestas son los micro y pequeños comerciantes, quienes se sienten impotentes por las bajas ventas, el cierre de sus negocios, el despido de sus trabajadores y la incertidumbre que amenaza el Perú.
Ante ello, las cajas municipales —principalmente de los departamentos en donde se ven los casos más violentos de protestas— han reportado una subida notoria en el nivel de morosidad, puesto que estas son «el brazo financiero de los microempresarios en el país».
Jorge Solis, el presidente de la Federación Peruana de Cajas Municipales de Ahorro y Crédito (FEPCMAC), anunció que solo el 50% de los clientes está cumpliendo con sus obligaciones crediticias; es decir, la mitad de microempresarios no puede cancelar sus deudas con la entidad.
«Nuestra morosidad al 18 de diciembre estaba en 4%, ahora está en 6%. Es un incremento fuerte. Hay mayor morosidad y nos queda la duda de cómo será en los meses próximos«, señaló el gerente central de Negocios de Caja Arequipa, Wilber Dongo.
Esto genera que la morosidad de la cartera de préstamos suba dos puntos porcentuales en un mes.
