¿El país necesita más generación eficiente? La respuesta es sí y lo vienen diciendo los técnicos del Comité de Operación Económica del Sistema Interconectado Nacional (COES), quienes indican que el 2026 como un punto de inflexión para nuestro sistema.
¿Cuál o qué tecnología? La respuesta no es directa, sino que estará en función de nuestra topología de red y ahí se te presentan soluciones en el corto, mediano y largo plazo bajo una mirada holística.
Propuesta de Hoja de Ruta
En el corto plazo:
Trabajar con Recursos Energéticos Renovables (sol, viento, agua, biomasa vegetal o animal) porque son las más rápidas de implementar y hasta la capacidad que determine el COES sin generar problemas mayores en el sistema.
Sería óptimo impulsar el tema de tecnologías híbridas, almacenamiento para mejorar confiabilidad y un mercado de servicios complementarios más maduro.
En el mediano plazo:
En paralelo, llevar gas al sur para el nodo energético para brindar al Sistema Eléctrico Interconectado Nacional (SEIN) los más de 1000 MW de generación eficiente y gestionable. Para que calcen los tiempos, la opción sería el ducto costero.
Lo anterior además tendrá otros beneficios extra.
El primer beneficio es que reduciría la presión sobre el sistema de transmisión (enlace centro – sur) que, últimamente, ha estaba trabajando bajo situación de excepción e impulsará la petroquímica y procesamiento de gas natural licuado (LNG), que son industrias de valor añadido.
En el largo plazo:
No dejar de lado a la tecnología hidroeléctrica, que es gestionable y permitirá cubrir la base de la demanda (que no es estática, sino que crece a partir del crecimiento económico como país).
Una hidro con regulación de caudales que nos permita mitigar riesgos climáticos (sequías).
Una planificación oportuna de nueva generación eficiente, sobre todo ante un inminente fenómeno de El Niño, permitirá evitar eventos no deseados en el SEIN, que nos resten competitividad para atraer inversiones al país.
Colaboración: Eduardo Ramos, experto en Transición Energética del Estudio MOAR.
