El optimismo prevalece entre los empresarios peruanos respecto al desempeño de sus negocios para el 2025, según la XXII Encuesta Anual de Ejecutivos (EAE-2024), realizada por la Cámara de Comercio de Lima (CCL). Este estudio, desarrollado por la Consultoría Interdisciplinaria en Desarrollo (CID), recoge la opinión de 380 empresas de diversos sectores económicos en Lima Metropolitana y analiza su percepción sobre el entorno económico, político y social.
Expectativas empresariales para el 2025
De los encuestados, el 72 % considera que sus negocios mejorarán en 2025, un 23 % cree que se mantendrán en niveles similares al 2024, y solo un 5 % prevé una caída. Estas proyecciones reflejan el optimismo generado por recientes acontecimientos, como la inauguración del Puerto de Chancay y el Foro APEC, los cuales fortalecen el comercio y la cooperación económica.
Óscar Chávez, jefe del Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial (IEDEP) de la CCL, señala que otros factores, como el control de la inflación y la reducción de tasas de interés, también contribuyen al optimismo, ya que podrían impulsar el empleo formal y mejorar los ingresos de los hogares.
En términos de inversión, el 31 % de las empresas proyecta incrementarla en 2025, mientras que un 52 % planea mantener su nivel actual. No obstante, el 17 % de las empresas anticipa una reducción en este rubro.
Principales amenazas para el entorno empresarial
A pesar de las expectativas positivas, el estudio resalta tres amenazas que podrían obstaculizar el panorama favorable del próximo año:
- Incertidumbre política y disturbios sociales: Los eventos políticos impredecibles generan desconfianza y afectan la planificación empresarial.
- Incremento de la inseguridad: La extorsión y otros delitos representan una barrera crítica para el desarrollo de los negocios.
- Políticas populistas e inconsistentes del Congreso: Estas generan inestabilidad y frenan la inversión privada.
Agenda empresarial para el crecimiento
Para garantizar un entorno propicio, los empresarios destacan cuatro prioridades:
- Controlar la inseguridad (54 %): Es el principal desafío, indispensable para el adecuado funcionamiento de las empresas.
- Estabilizar el entorno político (18 %): La previsibilidad y confianza son esenciales para la inversión.
- Combatir la corrupción (16 %): Este flagelo afecta la competitividad y la eficiencia.
- Desarrollar infraestructura (9 %): Mejorar la conectividad terrestre, aérea y ferroviaria puede optimizar la logística y el comercio.
Ventas y desempeño empresarial en 2024
En el contexto de recuperación económica, donde el PBI muestra un crecimiento cercano al 3 %, el 48 % de los empresarios estimó que sus ventas aumentarían respecto al 2023. De estos, el 29 % espera un crecimiento de hasta el 20 %, y el 19 % prevé superar este porcentaje. Sin embargo, un 35 % cree que sus ventas se mantendrán, mientras el 16 % anticipa una caída, principalmente entre mypes y negocios con menos de tres años de antigüedad.
Óscar Chávez subraya que el crecimiento económico en 2024 fue insuficiente para atender necesidades como el empleo formal, la reducción de la pobreza y una mayor recaudación tributaria. Las causas principales de esta limitación incluyen la inestabilidad política (55 %), la inseguridad y la extorsión (39 %), y la incertidumbre económica (22 %).
Inversiones empresariales en 2024
Las empresas destinaron sus recursos principalmente al mantenimiento y mejora de sus operaciones actuales, y en menor medida, al crecimiento de sus negocios. En empresas con mayor trayectoria, la inversión priorizó la infraestructura existente, mientras que los negocios jóvenes apostaron más por su expansión.
En el caso de las medianas y grandes empresas, un 38 % enfocó sus inversiones en mantenimiento y un 33 % en crecimiento, mientras que las mypes distribuyeron sus recursos en un 34 % y 30 % respectivamente para estos objetivos.
