Hoy se celebra el Día Internacional de la Papa, una fecha establecida por las Naciones Unidas para resaltar la importancia nutricional y económica de este tubérculo.
El Perú, reconocido como el principal productor de papa en América Latina, cuenta con más de 3 mil variedades y ha visto un aumento constante en su producción en los últimos años. Sin embargo, este 2024 la actividad enfrenta serios desafíos que podrían afectar su sostenibilidad y productividad.
Vulnerabilidad climática y plagas
La Red de Estudios para el Desarrollo (REDES) ha señalado que la producción de papa en el Perú es muy vulnerable a las condiciones climáticas adversas y a las plagas, como el ‘papakuro’ o gusano de la papa. En 2023, la producción cayó casi un 10% debido a estos factores.
En Perú, el 64% de las cosechas de papa dependen exclusivamente de las lluvias naturales, pues la gran mayoría no cuenta con el apoyo de sistemas de riego tecnificado. Esto significa que durante periodos de sequía, como los asociados al fenómeno de El Niño Costero, la producción se ve gravemente afectada.
Impacto económico y social
César García, economista de REDES, explicó que la producción de papa es crucial no solo para la industria peruana, sino también para la economía del país, ya que genera miles de empleos. Sin embargo, para mejorar estos resultados, se deben abordar las problemáticas que afectan a las familias productoras.
En la campaña 2022-2023, las prolongadas sequías impactaron severamente la producción en el departamento de Puno, donde la cosecha se redujo de 998 mil toneladas en 2022 a 596 mil toneladas en 2023, niveles similares a los de 2011.
Productividad y competitividad
Además de la vulnerabilidad climática, la baja productividad es otro desafío significativo. En 2023, se cultivaron más de 320 mil hectáreas de papa y se alcanzó una productividad promedio de 16.9 toneladas por hectárea.
La cifra posicionó al Perú en el puesto 87 a nivel mundial en términos de productividad, según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Capacitación y prevención
Para enfrentar estos desafíos, es fundamental implementar programas de capacitación para los agricultores. Los programas deben enfocarse en la prevención y control de plagas, también en técnicas de producción adaptadas a las diferentes zonas geográficas del país.
La capacitación permitirá a los agricultores optimizar sus prácticas agrícolas e incrementar así la producción y calidad de la papa.
