Amazon lanzó un memorándum el viernes a sus trabajadores, diciendo que esperaban que volvieran a la presencialidad desde la primera semana de mayo. Ante ello, los trabajadores han pedido a sus jefes que no los obliguen a volver, con el argumento que esta novedad no ha sido discutida con ellos.
Una destinada al CEO Andy Jassy pide cancelar este mandato y denuncia su cambio de postura sobre el trabajo remoto. Comunican que la confianza hacia sus coordinadores está «destrozada» pues no preguntaron las opiniones de los trabajadores sobre el cambio.
Los empleados crearon el mismo viernes un canal en la plataforma Slack para defender el trabajo remoto y compartir sus preocupaciones sobre la nueva política de vuelta al trabajo, según capturas de pantalla vistas por CNBC. Casi 14.000 empleados se habían unido al canal de Slack hasta ayer el martes.
Empleados de Amazon defienden la virtualidad
Amazon había permitido a los directivos determinar la frecuencia con la que los empleados debían estar en la oficina. Incluso construyeron una nueva oficina para implementar la nueva política post-pandemia.
El problema llega cuando los trabajadores se quejan debido a la poca flexibilidad que les ofrece el trabajo presencial. Muchos se mudaron de ciudad confiando en la seguridad de Jassy de mantener el trabajo virtual, por lo que se les dificulta volver.
Un escrito de la petición de los trabajadores a Jassy y al equipo ejecutivo de Amazon pide que cancelen los planes de regreso a la oficina e implementen una nueva política «que permita a los empleados trabajar de forma remota o más flexible, si así lo eligen».
«No es sencillo traer de vuelta a muchos miles de empleados a nuestras oficinas de todo el mundo, así que vamos a dar a los equipos que tienen que hacer ese trabajo algo de tiempo para desarrollar un plan», afirmó el CEO en un comunicado.