Opinión

Recuérdelo, elector: hoja de vida y propuestas

Por César Flores Córdova Publicado: Últ. actualización: 28 mayo, 2020 06:01
2 minutos

Ha empezado una nueva campaña electoral. Rostros nuevos y otros no tanto son la figura inicial de esta nueva película llamada Elecciones Congresales 2020.

Dos temas nos deben preocupar como electores: la hoja de vida y las propuestas que llevan los candidatos.

Es cierto que dichas preocupaciones no son nuevas, pero deben ser siempre nuestras principales preocupaciones antes de ejercer nuestro derecho a voto.

Acercarnos a la verdad de esos dos aspectos nos revelará las verdaderas intenciones de los candidatos que postulan al parlamento nacional.

Son más de 130 candidatos en la región Piura y de algunos tenemos referencias no tan buenas.

Entre los rostros conocidos existen políticos con sentencias judiciales o con procesos abiertos que, aunque exista presunción de inocencia, no deja de generar suspicacia su afán por llegar al Congreso.

Los rostros pocos conocidos o desconocidos es también una gran interrogante. Sabemos que en el país la formación de nuevas figuras políticas en los partidos es letra muerta.

Por ello, es importante poner cuidado en los ‘benjamines’ políticos.

¿Le parece exagerada la preocupación? Por mencionar algunos, solo recuerde a los excongresistas Mamani, Ponce, Foronda y Ramírez (Sí, el que dijo que “leer mucho da Alzheimer”).

Los rostros nuevos son un aliciente pero no una garantía de buen trabajo parlamentario.

Probablemente son buenos profesionales, pero los conocimientos en gestión pública e ideas políticas siempre se quedan a mitad de camino.

La realidad los puede abrumar y se podría reconfirmar la frase que va tomando fuerza: ‘este nuevo congreso solo será de aprendizaje’.

¿Y las propuestas? Pues, aún son casi desconocidas.

He conversado con algunos candidatos con experiencia en política y algo me queda claro: el tiempo no ha pasado. Los problemas planteados son los mismos y las propuestas tan iguales como hace diez años.

El discurso político está impregnado por los tópicos de siempre: pobreza, corrupción, salud, servicios básicos, etc.

Quizá el problema no está en los temas sino en el enfoque de los mismos. ¿Solo es corrupción? Es cierto que debemos estar al pendiente porque la corrupción es un flagelo, pero no es el único tema que le preocupa al peruano.

El discurso político se ha construido, desde hace varias décadas, sobre el pesimismo, la indignación y la declaración efectista. Bajo ese paraguas, las propuestas son irrealizables. Nos han vendido la realidad del país del ‘vaso medio vacío’.

La agenda diaria no debería construirse solo sobre desgracias.

El votante también tiene proyectos. Hoy miles de peruanos generan sus negocios propios y miles de mujeres emprenden con éxito.

Son una realidad pero aún son invisibles en la agenda del país.

Esperemos que los tomen en cuenta en las propuestas que escucharemos las próximas semanas.

NR: Artículo publicado en el diario El Tiempo, 7/01/2020