Joe Biden, presidente de los Estados Unidos, ha decido hoy miércoles derogar los decretos que prohibían a empresas como Tik Tok y WeChat operar en el país. Además, ha ordenado investigaciones sobre su seguridad para tomar nuevas medidas en el futuro.
Sin embargo, la Casa Blanca sigue con la preocupación que China utilice esas aplicaciones para espiar o recoger datos privados de ciudadanos estadounidenses con fines políticos.
Por ello, el nuevo decreto firmado por Biden establece un mecanismo para investigar si de verdad estas aplicaciones suponen una amenaza a la seguridad nacional, lo que Trump había confirmado en su gobierno.
Si la investigación lo corroborase al final del proceso, se tomarían medidas más estrictas y con mayor respaldo legal, argumentó el Gobierno en un comunicado.
Postura de Biden
La táctica de Biden se justifica en que las sanciones generalizadas de Trump estaban encallando ante los tribunales, que habían suspendido de forma cautelar su aplicación.
Aun así, los portavoces del Ejecutivo recuerdan que las sanciones siguen en el aire, y que esta medida no supone dar carta blanca a las apps de la polémica.
«Creemos que hay una amplia gama de acciones que se pueden negociar o imponer para garantizar que los datos de los estadounidenses estén protegidos», explicó el Ejecutivo.
En el 2020, Trump ordenó la venta de las operaciones estadounidenses de TikTok a empresas locales, una competición que acabaron ganando Oracle y Walmart. Sin embargo, Biden suspendió ese proceso en febrero de este año.
