El Instituto Peruano de Economía (IPE) define como cŕedito informal a aquel acuerdo voluntario entre dos agentes, quienes definen las condiciones del préstamo en función de los riesgos que cada uno este dispuesto a asumir, sin la intervención o supervisión de alguna autoridad competente como la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS).
En el estudio «El mercado de los créditos informales en el Perú» -que realizó IPE- se logra observar que el 32% de personas que realizaron este tipo de préstamos lo utilizaron para invertir en un negocio.
Asimismo, el 39% prestaron dinero para cubrir deudas y un 29% lo utilizaron para cubrir necesidades, es decir, casi un tercio de estas personas se vieron en la necesidad de prestar dinero para salud, educación o vestimenta.
También se puedo observar en el estudio que durante el período 2012-2022 la cantidad de préstamos informales casi se triplicó los gastos en salud, que fueron probablemente a causa de la pandemia.
Sin embargo, hubo un sector donde cayeron los préstamos informales, el cual fue la compra de viviendas, pues está asociado al menor costo de crédito formal para vivienda.
¿Cómo suele ser un préstamo?
Asimismo, el prestamista transfiere el dinero al prestatario y asume el riesgo de perderlo generalmente a cambio del pago de un interés.
En muchos casos el prestamista suele ser ser un amigo o familiar o una persona que se dedica a ofrecer créditos informales como negocio (esto incluye a las casas de empeño).
