En agosto de 202,2 Bad Bunny decidió ampliar su faceta como empresario al abrir su primer restaurante en Miami. El local, llamado Gekkō comenzó a crecer rápidamente en popularidad y es que la experiencia de lo que ofrece es una mezcla entre el lujo y la buena gastronomía.
A pesar de la buena receptividad que ha tenido, el restaurante no escapa a la controversia. La influencer de maquillaje Luisa Fernanda W habló de su experiencia en el local del puertorriqueño y reveló la increíble suma que pagó por el precio de los platos.
¿Qué dijo Luisa Fernanda del restaurante de Bad Bunny?
La colombiana, que acumula más de 18 millones de seguidores en Instagram, disfrutó de varios platos de la cocina japonesa, la especialidad del local que también incluye el concepto del steakhouse.
Luisa Fernanda pidió preparaciones como asados japoneses, sushi y platillos con oro de 24 quilates. La influencer aseguró que lo que más le gustó es que “algunos platillos tienen historia”.
«Es uno de los mejores restaurantes a los que he ido y esto no es publicidad paga, la verdad”, expresó en el video publicado en su Instagram.
A la hora de pagar, la cuenta fue bastante elevada y es que la colombiana canceló un total de 1.336 dólares, aunque hay que resaltar que estuvo con varias personas.
Los seguidores de Luisa Fernanda no tardaron comentar que era mucho dinero. «Lú con eso que pagaste terminaría yo mi casa en Panamá», escribió una seguidora. Otro resaltó: «Se ve muy bien, pero mi presupuesto no da para tanto».
¿Cuánto cuesta comer en el restaurante de Bad Bunny?
El restaurante del «conejo malo» se caracteriza por su oferta de lujo. El menú está diseñado para ofrecer platos típicos de la comida asiática y carne Wagyu.
El portal Terra reseñó que los platos son costosos. Las preparaciones con carne Wagyu varían entre los 250 a 300 dólares por 450 gramos. Aunque también se pueden conseguir platos que van desde los 14 dólares hasta los 120 dólares.
Demanda contra Bad Bunny
Definitivamente el 2023 no ha sido el año perfecto para Bad Bunny y es que después de que en enero fue duramente criticado por lanzar el teléfono de una fanática, ahora enfrenta una demanda de su expareja.
Carliz De La Cruz está demandando al intérprete de «Ojitos bonitos» por derechos de imagen, derechos morales de autor, daños y perjuicios. Según Carliz, su ex Benito Antonio Martínez Ocasio, nombre real del cantante, habría usado frases creadas por ella en sus canciones.
La demanda, de unos 40 millones de dólares, es por usar la frase ‘Bad Bunny baby’ que fue supuestamente creada por Carliz en 2015 cuando aún el puertorriqueño no alcanzaba la fama internacional. De momento, ni Bad Bunny ni su equipo legal se han pronunciado sobre la demanda.