El Estudio Nacional del Fenómeno El Niño (Enfen) activó su alerta de vigilancia ante la presencia del fenómeno de La Niña costera, que podría traer consecuencias en el agro y la generación eléctrica.
Consecuencias climáticas previstas
Según Enfen, si La Niña se consolida en el Pacífico central, el Perú podría experimentar lluvias por debajo del promedio hasta la primavera, específicamente en las regiones andinas central y sur.
Además, se espera que hasta agosto los ríos del norte y sur tengan caudales menores, lo que agravaría el déficit hídrico que ya es común en esa época del año.
La dependencia de la hidroeléctrica
En el Perú, el 71% de la capacidad de generación hidroeléctrica se encuentra en el centro del país, principalmente en la cuenca Mantaro, que alberga 25 hidroeléctricas. Otro 18% de la generación hidroeléctrica se ubica en el sur y el 11% en el norte, áreas que podrían tener lluvias por debajo de lo normal.
Impacto histórico de La Niña
Rafael Laca, experto en energía, advierte que una reducción en las lluvias podría afectar la producción hidroeléctrica, como sucedió durante La Niña de 2021-2022.
En aquel periodo se experimentó una disminución en la generación hidráulica, lo cual obligó a usar más centrales térmicas a diésel, elevando el costo de generación de 30 dólares por megavatio hora (Mw/h) a 86 dólares.
Pronósticos actuales
Laca calcula que, si las lluvias disminuyen y se afecta la producción hidroeléctrica, se necesitará recurrir nuevamente a generadoras a diésel.
Esto podría elevar el costo de la energía desde los actuales 27 dólares por Mw/h (registrados en mayo de 2024) hasta 80 de dólares por Mw/h. Arturo Vásquez Cordano, exviceministro de Energía, coincide en que La Niña representa una amenaza, ya que genera sequías en áreas clave para la generación hidráulica del país.
Por otro lado, el Comité de Operación Económica del Sistema Interconectado Nacional (COES) podría tener que activar las térmicas a diésel, lo cual podría aumentar los costos hasta 100 dólares por Mw/h, afectando principalmente a los usuarios libres del mercado eléctrico, es decir, grandes consumidores que negocian directamente con los generadores o distribuidores y cuyos contratos están próximos a vencer.
Necesidad de nuevas inversiones
Para Vásquez, las continuas anomalías climáticas resaltan la necesidad de desarrollar nuevas fuentes de generación más eficientes. No cree que incrementar la participación de energías eólicas y solares sea la solución, debido al bajo brillo solar actual.
No obstante, propone aumentar la generación con térmicas a gas natural. Sin embargo, los proyectos actuales se centran en energías renovables (RER) y pocas hidroeléctricas, sin incluir nuevas centrales a gas natural.
