La palabra globalización fue una moda que formó una economía mundial durante décadas. Pero ¿qué significa eso? ¿Y qué impacto tendrá en la economía local? El término globalización se refiere al proceso de integración e interdependencia entre economías de todo el mundo.
Esta interdependencia puede ocurrir en muchas direcciones, incluidas la tecnología, el comercio y el transporte. La economía global está creciendo y prosperando debido al aumento del comercio global.
Pero esa misma apertura presenta desafíos para las economías locales. Para ayudar a mapear las oportunidades y desafíos de esta globalización, una pizarra blanca online puede ser de gran ayuda, ya que en ella puedes vaciar toda la información necesaria. Organizando cuáles son los desafíos que afectan a tu empresa, y cómo enfrentarlos, además, analizar las oportunidades y crear estrategias para aprovechar al máximo esta globalización.
Los beneficios económicos de la globalización
El crecimiento económico es un punto de venta único (PVU) para cualquier país que explore la posibilidad de abrir sus fronteras al mundo. El comercio internacional y la inversión extranjera directa proporcionan economías de escala, acceso a nuevos mercados y acceso a nuevas fuentes de capital.
Esto beneficia directamente al país y ayuda a aumentar la productividad, reducir costos y aumentar las ganancias corporativas. El aumento de la actividad económica siempre se transfiere a las oportunidades de empleo.
Cuando los inversores mundiales ingresan a la economía local, también ofrecen capital, experiencia y tecnología. Esto ayuda a impulsar la innovación y el crecimiento en la economía local.
El impacto positivo de la globalización en las economías locales
La globalización puede tener un impacto positivo en la cultura, la sociedad y el medio ambiente locales. Los beneficios más comunes de la globalización son:
Flujo de personas y bienes
El movimiento global de personas y bienes trae nuevas perspectivas, ideas y experiencias culturales. La economía local tendrá nuevas oportunidades de cooperación e innovación.
Las inversiones están registradas entre la globalización, el PIB (Producto Interior Bruto) e IDH (índice de desarrollo humano).
Según los resultados de 2020, la tasa de crecimiento del PIB fue de 5.87% al final de 2020, que fue de 8.99% más que en 2019.
Calidad y disponibilidad de los artículos
A medida que los mercados locales se convierten en un ámbito competitivo para vendedores de todo el mundo, los consumidores locales se benefician más.
Pueden obtener productos de alta calidad a precios competitivos. Un gran paso adelante en la tecnología nacional – Los países en desarrollo se han beneficiado enormemente de avances en la tecnología celular que antes no se habían visto a nivel nacional.
Acceso a nuevos mercados
Los productores locales pueden vender sus productos a un público más amplio a escala internacional.
Mejorar la sostenibilidad ambiental
Los países pueden trabajar juntos para resolver los problemas ambientales globales. El cambio climático y la contaminación no se limitan a un solo país.
El impacto negativo de la globalización en las economías locales
La «moneda» de oro de la globalización tiene un lado oscuro. Los efectos secundarios más comunes son:
Desempleo local
Uno de los mayores efectos de la globalización puede ser la posible pérdida de empleos. Las empresas tienden a trasladar sus operaciones a zonas económicas más baratas, lo que provoca desempleo en la economía local.
Explotación laboral
Las corporaciones globales utilizan mano de obra barata para producir productos como la moda rápida para maximizar las ganancias.
Impuestos y aranceles a la exportación
Los fabricantes locales enfrentan aranceles y otros costos cuando intentan exportar sus productos a los mercados internacionales.
Desigualdad económica
Las pequeñas y medianas empresas a menudo tienen dificultades para competir con las corporaciones multinacionales. Esto conduce a diferencias de ingresos dentro de la comunidad.
Volatilidad del mercado
La interdependencia económica expone a las economías locales a shocks y volatilidad externos. Las fluctuaciones en los tipos de cambio y los precios de las materias primas pueden causar daños importantes a las economías locales.
La globalización también puede tener consecuencias negativas para la cultura y la sociedad. Existe el riesgo de que la diversidad cultural se pierda a medida que la cultura y los valores occidentales se exportan a todo el mundo. Trae consigo importantes beneficios, pero no se distribuyen equitativamente. Por lo tanto, es probable que haya disturbios sociales y políticos.
Permite el crecimiento económico y un mayor comercio mundial. Sin embargo, esto también causa problemas en muchos sentidos a la economía local. Las economías locales deben trabajar para minimizar los impactos negativos y maximizar los beneficios mientras continúan navegando por las complejidades de la globalización.
Globalización de los mercados financieros
El rápido aumento de la movilidad de los factores de capital en la década de 1980 condujo a mercados totalmente conectados en todo el mundo para los países que optaron por abrirse a los mercados extranjeros.
La globalización en la década de 1990 incluyó nuevos países, mercados e instrumentos financieros. La globalización fue rechazada por las críticas a los mercados financieros, la difusión de la tecnología de la información y la comunicación y la creación del flujo de información.
Cada elemento ha llevado a un mercado a gran escala, como Estados Unidos, Europa, Japón y Taiwán, y se puede colocar en todos los mercados públicos del mundo. Hasta la década de 1980, los países con altas tasas de ahorro ofrecían fuertes ventajas comparativas para la inversión local, ofreciendo bajas tasas de interés y permitiendo un rápido desarrollo.
Japón, Corea, Taiwán, etc. Pueden utilizar esta enorme ventaja sobre Occidente durante años. Tasas de interés a largo plazo (bonos del tesoro), la proporción de los mercados estadounidenses es de 1:2. A Japón le llevó mucho tiempo, pero ahora se acercan a los mismos valores en ambos países y en Europa.
El coste del préstamo posterior depende de la empresa y de la ubicación de la inversión. Las empresas populares que ofrecen más seguridad pueden obtener préstamos a costos más bajos. Los países de bajo riesgo pueden aumentar su competitividad haciéndolos más atractivos para la inversión.
La competencia por conseguir financiación es cada vez más feroz. Los principales demandantes incluyen a los gobiernos de los países desarrollados (para eliminar los déficits), los países de la ex Unión Soviética y los países en desarrollo de Asia y América Latina.
Como resultado, la competitividad garantiza muy buenas condiciones (rentabilidad) y estabilidad. Esto es especialmente importante porque en el mundo actual la mayoría de los fondos se canalizan a través de inversiones directas (bonos, acciones, empresas conjuntas), es decir, mediante participación en la propiedad.