El reciente ajuste en las proyecciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) sitúa el crecimiento en 2,5%, una cifra por debajo de las estimaciones más optimistas del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) y el Banco Central (BCRP), quienes prevén un modesto rebote del Producto Bruto Interno (PBI) alrededor del 3%.
¿Qué sugiere Arista?
Por su parte, José Arista del MEF destaca la importancia de aspirar a tasas cercanas al 5% para lograr un impacto real en la calidad de vida de los peruanos.
Para lograr este objetivo, es crucial abordar problemas arraigados como la violencia, la inseguridad ciudadana y la corrupción, factores que frenan el desarrollo económico y social.
¿A qué se deben las proyecciones del FMI?
Este panorama se vincula con deficiencias estructurales, como el poder de los grandes empresarios y la influencia política, que estancaron el progreso económico.
El desafío radica en alcanzar tasas de crecimiento más robustas, al considerar que el 3% estimado no es suficiente para reducir la pobreza y las desigualdades sociales, según lo expuesto por Arista hace dos semanas.
¿Qué oportunidad de crecimiento se le presenta al Perú?
En cuanto a las relaciones comerciales con China (el principal socio comercial del Perú) las perspectivas son alentadoras.
China experimentó un crecimiento del 5,3% en el primer trimestre, lo que representa una oportunidad para impulsar las exportaciones peruanas.
Ante ello, la propuesta de ajustes al Tratado de Libre Comercio con China busca fortalecer aún más esta relación y fomentar nuevas inversiones, especialmente en proyectos clave como el megapuerto de Chancay.
Finalmente, en el ámbito regional, Perú espera superar el promedio de crecimiento de Sudamérica y América Latina, aunque aún se encuentra rezagado frente a otros países como Venezuela, Paraguay y Uruguay.