Estamos en año electoral. En octubre de este año habrá elecciones para alcaldes y gobernadores regionales.
Es una época en que los movimientos políticos se dedican a pasar el sombrero y muchos empresarios podrían caer en el juego peligroso de la corrupción.
El fantasma de Odebrecht ronda y es necesario actuar con honestidad si queremos que las cosas cambien.
Eso sí, no tiene nada de malo apoyar una campaña política, siempre y cuando cumplan ciertos requisitos.
Hay que recordar que el Congreso de la República aprobó en octubre del año pasado la modificación de artículos de la Ley de Organizaciones Políticas referidos al financiamiento de los partidos.
En el artículo 31, que menciona las fuentes de financiamiento prohibidas, se dispuso que las agrupaciones políticas no puedan recibir aportes “de ningún tipo” de personas jurídicas nacionales o extranjeras.
Tampoco podrán recibir contribuciones de personas jurídicas nacionales sin fines de lucro, así como de personas naturales o jurídicas extranjeras sin fines de lucro, «excepto cuando estén exclusivamente destinadas a la formación, capacitación e investigación».
Así que los aportes que te pidan siempre serán como persona natural y no a nombre de tu empresa. Si alguna vez un movimiento se te acerca, sigue estos pasos si quieres realmente ser parte de la solución y no del problema.
1. Pídele su plan de gobierno
¿Cuál es tu plan de gobierno, me lo puedes pasar? Esta pregunta sencilla puede ser suficiente para darte cuenta con qué tipo de político estás tratando.
Si te dan largas o te dicen «nuestro equipo de plan de gobierno lo está trabajando», quiere decir que no lo tienen. La improvisación cunde y lo mejor es no darles ni un sol.
2. Que sea bancarizado
Nada de fajos de billetes a lo Montesinos. Que tu contribución a un partido esté registrada en el banco, y en los del movimiento. Que sea público y transparente.
No entregues ni un sol a una cuenta de un nombre particular ni después de firmar haber firmado un comprobante con el representante legal del partido o movimiento en cuestión.
3. Pago en especie
Un temor de los empresarios a realizar un aporte de campaña es que no sabes en qué se lo gastará el susodicho candidato. Lo mejor entonces es preguntar qué necesitan: transporte, pintura, impresiones, pancartas, local, etc.
Tu aporte puede ser en especie, pero siempre firma un contrato para estipular el tipo de ayuda.
4. Límite del aporte
Según la ley, una misma person, no puede realizar aportaciones a un mismo partido político o a sus candidatos que, sumadas sean mayores a sesenta (60) Unidades Impositivas Tributarias en un ejercicio presupuestal anual.
5. No esperes nada a cambio
La naturaleza de una aportación a un movimiento político se desvirtúa por completo si esperas una prebenda o ayuda del posterior ganador. El aporte se hace porque concuerdas con las ideas y visión de desarrollo del candidato o movimiento, no con los «favorcitos», legales o no, que obtendrás después.
Recuerda que la lucha contra la corrupción empieza por uno mismo, si queremos cambiar el país, debemos cambiar nosotros.