58 años de historia. Descubre Tai Loy, la empresa peruana que se ha posicionado en la mente de los peruanos como una librería que ofrece una gran variedad de útiles escolares, juguetes y artículos de oficina.
Fundada por el visionario inmigrante chino Alfonso Koc Fong, Tai Loy dio sus primeros pasos como un modesto bazar en el centro de Lima. Su capital inicial fue de cinco mil dólares de capital, con el que alquilaron un local de 50m2 en la cuadra 7 del Jr. Andahuaylas. Allí se ofrecían diversos artículos de pasamanería y regalos.
El impulso emprendedor de la familia Koc Fong era innegable y los hijos se nutrían de ese espíritu. El hermano mayor, Alfonso Oscar trabajaba junto a su padre mientras que el aun infante Jorge Luis ayudaba en sus ratos libres. Años más tarde, su hermano menor Carlos Augusto se uniría a la atención en la tienda.
El crecimiento fue inminente. Con el tiempo, Tai Loy ganó una clientela fiel, atrayendo a mayoristas de provincias que acudían al centro de Lima para abastecerse de los variados productos que ofrecían.
Sin embargo, la familia enfrentó un duro golpe con la partida de Alfonso Koc Fong, a solo cinco años de la fundación de la empresa. Aún así, unidos y con determinación, sus hijos se embarcaron en mantener lo construido por su padre.
En 1976, Tai Loy amplió su negocio mayorista para incluir una línea de útiles escolares, artículos de oficina y juguetes, lo que marcaría un punto clave en su crecimiento. Tres años después, en 1979, lograron abrir su segundo local.
Apogeo de Tai Loy
Los años 90 marcaron el apogeo de la empresa. Con audacia, Tai Loy se expandió rápidamente y estableció una tercera tienda en la célebre calle Capón, en el Barrio Chino de Lima, en 1990. En 1995, la compañía registró una impresionante facturación de US$30 millones, y para 1998 ya inauguraba su séptima tienda en el distrito de Independencia.
Fue en ese momento que el significado detrás del nombre «Tai Loy» cobró sentido: ¡Comienza la prosperidad!
En los años 2000, Tai Loy decidió aventurarse fuera de la capital y expandirse hacia provincias.
Su primera incursión fue en el norte del Perú, estableciendo una tienda en la ciudad de Chiclayo. Pocos años después, en el 2002, la compañía llevó su exitoso modelo de negocio al sur, inaugurando su primera tienda en Arequipa. Luego, en el 2005, Tai Loy dio un paso más hacia el negocio minorista y corporativo y abrió más tiendas en Lima, en la avenida Arenales, y en los distritos de La Molina y San Isidro.
Medio siglo de historia
En el 2015, Tai Loy cumplió 50 años y ya contaba con 47 tiendas a nivel nacional y 2 centros de distribución.
Además, tenía a 1,200 empleadores en todo el Perú y una facturación anual de S/ 540 millones, según datos de la página oficial de Tai Loy.
Cabe resaltar que para este año también adquirió CopyVentas en Trujillo, ampliando su mercado en el norte del Perú.
Crecimiento
El gerente general de Tai Loy, Óscar Pizarro, comentó para Semana Económica que durante los años 2020 y 2021 (pandemia) fueron períodos muy duros porque hubo clases escolares y afectó la venta de útiles. Por ello, tuvieron que agregar nuevas categorías como libros, higiene, limpieza, etc.
Pizarro dio a conocer que en el 2021 la empresa facturó S/565 millones, un 18% más respecto al año anterior; sin embargo, no pudo superar los golpes de la pandemia.
Por otro lado, para el 2022 proyectaron ventas por S/930 millones, un monto mayor a lo registrado en prepandemia.
Planes a futuro
Desde el 2020, Tay Loy puso en marcha su canal de e-commerce, el cual le costó S/ 882,000. Según Pizarro, el número de pedidos diarios pasó de 200 a 1,000. Por ello, la empresa seguirá agregando categorías a su canal de e-commerce como muebles y electrodomésticos.
También busca mejorar sus tiempos de entrega. “El 99.5% de los pedidos los despachamos en menos de 24 horas y queremos entregar la mayoría el mismo día”, resaltó Pizarro.
Además, proyecta seguir expandiendo su cobertura en las provincias del Perú y abrir tiendas en nuevos malls.
Para este 2023 tiene planeada su expansión internacional en Sudamérica.
Hoy en día, Tai Loy es sinónimo de prosperidad, un testimonio del arduo trabajo y la visión empresarial de una familia que ha dejado una huella imborrable en las familias peruanas.
