Ricardo Paulini, o chinito como lo conocen en Piura, es un emprendedor de 35 años que ha logrado alcanzar el éxito en su corta trayectoria. Su historia se remonta a sus días universitarios, cuando descubrió su pasión por el derecho. A pesar de su juventud, sentía la necesidad de tener un ingreso extra para los fines de semana, por lo que decidió trabajar como camarero en el restaurante «Esta es mi tierra». Aunque al principio recibía como pago un «Gatorade», esta experiencia sirvió para despertar su interés por los negocios.
Después de un tiempo, se desilusionó de su carrera en leyes y decidió estudiar Administración en Trujillo. Fue allí donde se encontró con su amigo Raúl Lozano, quien poseía una empresa constructora y le ofreció trabajo como administrador.
Durante este nuevo periodo de estudios, tomó la audaz decisión de embarcarse en un programa de «Work and Travel» en Minnesota, Estados Unidos. Durante su estancia, desempeñó diversas labores, incluyendo el cuidado de habitaciones en un hotel, trabajos nocturnos de limpieza de nieve y el transporte de huéspedes desde y hacia el aeropuerto.
El comienzo de la cadena de restaurantes
Al terminar su carrera y mudarse a Lima, ahí conoció su gusto por los locales gastronómicos, pero no solo por la comida, sobre todo, por el servicio que ofrecían. El observar esta diferencia de los restaurantes de la capital con los de provincia, ¿por qué no hacerlo en Piura?
«Si vives en Lima es bien difícil llegar a comer a la casa, yo no llegaba a comer a la casa, entonces comía todos los días en la calle, entonces ahí le empecé a agarrar un poquito el gusto a la comida, pero también al servicio que se da en los distintos restaurantes o locales que brindan comida», relata Ricardo.
Entonces, en el marco del auge de la Marca Perú y la popularidad de Gastón Acurio, Ricardo y su socia Alexandra León se convencieron de aprovechar eso para abrir una línea empresarial, teniendo en cuenta que el papá de la joven ya tenía su restaurante ‘Bahía Blanca’, por lo que les enseñaría todo sobre el negocio.
Estuvieron un año aprendiendo del rubro gastronómico, para luego animarse a abrir su primer restaurante: La Bocca.
Nacimiento de La Bocca
Alexandra y Ricardo, con 28 y 29 años, encontraron un local en la avenida Andrés Avelino Cáceres- un lugar muy concurrido y visible para todos- donde se encuentran hasta la actualidad.
Raúl, su amigo trujillano, quiso poner un restaurante, pero por cosas del destino nunca lo logró abrir. Entonces, Ricardo lo llamó y le pidió que le venda todos los implementos que había comprado por el local. «Chinito, yo veo que a ti te guste el negocio y tú has trabajado para mí, llévate todo y me pagas como puedas«, le dijo su amigo Raúl.
Ricardo asegura que este restaurante fue donde él y su socia Alexandra iniciaron todo el patrimonio que tienen ahora.
- Avenida Andrés Avelino Cáceres 234, Piura (Referencia: a una cuadra del grifo Mega).
- Avenida Marcavelica Mz. B Lote 38, Urbanización La Alborada.
Bottega Capuccino
La segunda adquisición de los Paulini León fue el «Bottega Capuccino» en junio del 2018, que en ese entonces estaba al costado del hotel Río Verde (ahora Casa Andina). Las antiguas dueñas de esta cafetería y pastelería netamente tradicional -dirigida a un público adulto y adulto mayor- vendieron su marca a estos dos jóvenes que han sabido sacarla adelante.
«Estuvimos en un tira y jala durante varios meses porque me pedían un montón de plata. Llegamos a un acuerdo y ya les compramos la marca con todo y trabajadores dentro. Actualmente tenemos muchos trabajadores«, comentó Paulini.
A la fecha, el local se encuentra en reestructuración, pues Ricardo quiere darle una experiencia única y diferente al público piurano, por ello, ha invertido medio millón de soles en su remodelación.
- El local se encuentra en la calle San Miguel N°298, en la urbanización Santa Isabel.
La Barra del Chino
Una vez que iba creciendo más el negocio, Ricardo comenzó a viajar más seguido a Lima para comprar menaje y otras cosas que necesitaban los restaurantes. Fue durante esos viajes donde observó los locales de los cuales se inspiraría para abrir más restaurantes.
«En esos viajes este yo visité la línea de Barra chalaca y la Barra de Ronald que son cevicherías prácticamente al paso, que están en lugares estratégicos de Lima y me gustó», indicó Paulini.
Es así como nace «La Barra del Chino», un restaurante al paso con precios económicos -a diferencia de los otros locales con los que cuenta Ricardo- y que ofrece platos marinos como el ceviche, la causa, arroz con mariscos, entre otros.
«La papa rellena, el tamalito, ceviche de pota y la leche de tigre que son platos que la gente de pie te puede pagar 5 o 10 soles por darse un gustito», relata Paulini, orgulloso de sacar esta línea de manera individual.
- Primer local: San Felipe E-26.
- Segundo local: Calle Junín #713 – Piura
La Peruana Sanguchería
El último local que abrió Ricardo Paulini es «La Peruana Sanguchería». Hasta el momento no se da la inauguración del local, pero ya está abierto para el público y está siendo uno de los locales más concurridos de la venta de sándwich.
Esta nueva adquisición también fue inspiración de uno de sus viajes a Lima, pues fue a comer a «La Lucha», sanguchería criolla del piurano César Taboada, le gustó tanto que repitió el modelo en Piura.
No todo es éxito
Ricardo abrió un local de «La Barra del Chino» en Sullana, una ciudad que se encuentra en el departamento de Piura. Este suceso lo considera que fue su primer error.
El empresario relata que el público de Sullana era muy exigente con su restaurante, le pedía porciones muy exuberantes y, lo que empeoró todo, fue que la Municipalidad hizo mantenimiento a las calles por donde estaba su loco. En este negocio perdió una fuerte cantidad de dinero que supera las 5 cifras.
Proyecciones
El joven empresario tiene planeado expandir algunos de sus locales a Lima y al extranjero. Asimismo, pretende expandir su línea de restaurantes sacando uno especializado en parrillas en la ciudad de Piura.
Además, adquirió hace poco un foodtrack que se dividirá en dos: La Barra del Chino y La Peruana Sanguchería, para alquilarlo para eventos como matrimonios, cumpleaños y aniversarios.