Fanta, la gaseosa perteneciente a Coca Cola, es una de las marcas más reconocida a nivel nacional e internacional y su historia se remonta a más de medio siglo atrás.
Sin embargo, pocas personas conocen que el pasado de la bebida se dio en un contexto en el que lideraba el régimen nazi en Alemania. En esta nota conoce más sobre esta gaseosa y cómo logró enfrentar las adversidades.
Coca Cola en Alemania
Para 1923, Coca Cola ya poseía un gran prestigio dentro de Estados Unidos así que decidió comenzar su internacionalización. Sin embargo, al ingresar a otros mercados no tuvo el mismo éxito que en el país norteamericano, así que creó embotelladoras en diversos lugares del mundo, según La República.
De esta manera, con Ray Rivington Powers a la cabeza, Coca Cola ingresó al país europeo. Al principio, consiguió buenas ventas, pero al descuidar las finanzas, la compañía comenzó a caer.
Frente a esto, Max Keith asumió el mando de la compañía y decidió publicitar el producto como nacional para generar mayor interacción con los posibles clientes. Esto les permitió multiplicar las ventas, pasando de comercializar 100,000 botellas al año a más de 5 millones.
¿Cómo nació Fanta en medio del régimen de Adolf Hitler?
Cuando Adolf Hitler llegó al poder de Alemania, las cosas para Coca Cola se pusieron difíciles, pese a que en principio habían funcionado bien.
En 1941 se vivió el bombardeó de Pearl Harbor y Estados Unidos se unió a la Segunda Guerra Mundial.
Además, como Coca Cola ya no tenía los suministros necesarios para fabricar sus bebidas, rompió los lazos con su filial europea.
Fue ahí que Keith decidió buscar una nueva fórmula que le permita elaborar un producto para sobrevivir. De esta forma, a base de suero lácteo y pulpa de frutas nació la gaseosa Fanta.
Según Jesús Hernández, en su libro «Historias asombrosas de la Segunda Guerra Mundial», la bebida naranja llegó a ser tan famosa en Alemania que el régimen Nazi quería apropiarse de la fórmula y nacionalizar la gaseosa.
El éxito de Fanta fue tan grande que se convirtieron en la bebida favorita del público alemán, llegando a vender 3 millones de botellas al año.
Finalmente, en 1970, la compañía de Estados Unidos adquirió los derechos de Fanta por lo que se inició su expansión por todo el mundo.
¿Lazos con el nazismo?
Luego de la guerra, Coca Cola abrió una investigación para identificar si los directivos de la filial alemana mantenían lazos con el nazismo o el régimen de Adolf Hitler.
Sin embargo, Hernández detalló que, ni Fanta ni Keith habían mantenido relación con los nazis, decidiendo así que se continuara con la fabricación y comercialización de la gaseosa.
Incluso, se determinó que la empresa planteó medidas para proteger a algunos empleados que se encontraban en el punto de mira de la Gestapo.
