No cabe duda que para que cualquier emprendimiento progrese es necesario que se reinvente cada cierto tiempo, que no caiga en la rutina, que sepa innovar, se adapte y se abra espacio en nuevos mercados.
Y esa filosofía empresarial la han entendido muy bien ‘los César’ Bocanegra.
Padre e hijo ahora son socios del conocido Chechar Jr., un restaurante chiclayano que nació como cevichería y que ahora apunta a nuevos nichos de clientes.
Hace 27 años, César Bocanegra Navarro y Justina Lisboa, educadores de profesión, fundaron el restaurante.
El negocio comenzó como una manera de generar ingresos extras pero, con el paso del tiempo, comenzó a crecer, hasta convertirse en un ícono del pescado en la “Ciudad de la amistad”.
Las conchas negras
El ahora patriarca del coloso cevichero cuenta que aprovecharon una oportunidad que hasta en ese momento pocos habían explotado en Chiclayo: el ceviche de conchas negras.
Cuando empezaron a venderlo, el negocio comenzó a andar a grandes pasos.
“Mi esposa trabajó algunos años en Tumbes y me sugirió vender conchas negras. Me dijo: “Trabajamos todo el día y luego vendemos conchas negras”, afirma don César.
Iniciaron la venta al mediodía acompañándolas con ceviche mixto, tortitas de choclo y humitas.
Luego se dedicaron a vender conchas negras: «Era lo que más salía, vendíamos mucho», afirma.
El negocio fue viento en popa y el pequeño local cedido por su cuñado ya quedó corto. Lo ampliaron y añadieron una atención más eficiente.
¿Cuál es el secreto de las conchas negras? La frescura, resume don César.
“La concha negra es el ceviche más fresco que puedes comer porque te la comes literalmente viva, tiene que estar así para poderla saborear por completo”, refiere
¿Y quién cocinaba cuando todo empezó? César Bocanegra cuenta que él mismo preparaba el negro ceviche.
Eso sí, siempre bajo la supervisión de su socia y esposa.
“Muy aparte de lo que yo he aprendido de forma empírica, me he capacitado en un instituto. Ahora contamos con dos personas en la cocina y yo básicamente me encargo del abastecimiento, de la logística y la supervisión”, comenta.
Difícil momento
La época de lluvias del 2017 afectó a toda la ciudad de Chiclayo y el Chechar Jr. no fue ajeno al desastre.
Durante una copiosa precipitación, una de las paredes del negocio se vino abajo, y destruyó prácticamente todo el local, por lo que los Bocanegra se vieron obligados a cerrar.
No obstante, como se dice popularmente, no hay mal que por bien no venga.
“Tuvimos que mudarnos a otro local más pequeño en la esquina y hacer una completa reingeniería del restaurante, para ofrecer ambientes más amplios, más iluminados y más cómodos. El proyecto para la remodelación estaba programado para el 2020, sin embargo por las lluvias tuvimos que adelantarlo», recuerda.
La familia Bocanegra Lisboa tuvo que esperar cuatro meses para tramitar la inversión y felizmente podemos cubrirla. Ahora, el nuevo local tiene tres niveles con un mejor servicio.
El legado
Un nuevo renacer asoma en el Chechar Jr. y ahora es César Bocanegra Lisboa quien comanda el barco junto a su padre.
El primogénito de la familia es licenciado en Comunicación y se ha especializado en el tratamiento corporativo de las empresas, por lo que su visión ha encajado a la perfección en el restaurante.
Y ojo: no solo en el relanzamiento del aspecto digital, sino también en un mejoramiento del trato al cliente.
“La idea es complementar toda la imagen que tiene el restaurante con temas digitales, relaciones públicas y comunicación corporativa. Hemos tratado de implementar todos esos recursos, los canales de comunicación para difundir y así compenetrar con otros públicos y llegar a ellos”, comenta el hijo del fundador.
Como comunicador, César Bocanegra sabe que no solo el sabor de la comida es esencial para un restaurante: la atención al cliente es básica para que un negocio de este rubro tenga verdadero éxito, y él lo ha sabido aplicar con un plan de comunicación completo.
“En mi profesión me he desempeñado en el tema de atención al cliente. En el negocio de los restaurantes un buen servicio es el complemento de una buena comida y una buena comida es el complemento de un buen servicio. Todo tiene conexión”, afirma.
Asimismo, César hace hincapié en que el tema audiovisual es básico para un restaurante.
“Uno también come por los ojos, cuando una persona ve un plato atractivo lo incita a comer. Lo visual, lo gráfica, la fotografía, los videos se trabajan pensando en cómo lo vas a comunicar», afirma César hijo.
Asimismo, añade: «Mi papá se encarga del diseño del plato, el despacho de la comida y la sazón. Yo me enfoco en apoyarlo en tema de atención al cliente, por eso los dos hicimos match”.
Nuevos mercados
Pero el ingreso al negocio del hijo de los Bocanegra Lisboa no solo ha significado un mejoramiento en la atención al cliente. También, una puerta a un nuevo rubro culinario: los sándwiches diurnos.
Con el objetivo de sacarle provecho al local e innovar la empresa, ahora Chechar Jr. también atiende en las tardes, apostando por nuevos platos para diferentes públicos. Eso sí, siempre conservando la misma sazón y la calidad en la atención.
“Ahora que hemos remodelado el local nos dimos cuenta que solo se estaba explotando el 40% del local. La propuesta que le hice a mi padre fue de ampliar el servicio y explotar la locación, y aprovecharlo al 100% implementando en desayunos, lonches y comidas nocturnas”, cuenta César.
En ese sentido, han comenzado con el tema de los lonches, incluyendo una carta simple, pero atractiva y sobretodo sabrosa: sándwiches de lechón, de pavo, asado, chicharrón de chancho e infusiones.
Esta implementación ya tiene tres meses y, aseguran, está caminando muy bien.
“Cambiamos la perspectiva y dejamos de ser cevichería. Ahora somos un restaurante, lo cual te permite llegar a más público que ante no tenías en cuenta porque te especializabas en pescados y mariscos», refiere
Hoy, Chechar Jr. atiende gente de noche y en la mañana.
«Por el feeling que tienen con el restaurante vienen a probar y les gusta y eso nos da mayor rentabilidad”, comenta César.
Dirección: Avenida Bolognesi 603 – Chiclayo.
Contacto: 978890589 – 968900921.
Horario de atención: 9:00 a.m. – 11:00 p.m.