Hace poco más de una semana, un anuncio sobre la venta de una compañía generó un revuelo en la Sociedad Nacional de Industrias (SNI). Y es que, el contrato de compra-venta entre China Southern Power Grid, una empresa china, y el grupo Enel Perú, encendió las alarmas de la SNI, quienes expresaron su preocupación por el creciente monopolio que los chinos están adquiriendo en el mercado energético peruano.
Además, resaltan que con esta compra se genera un monopolio chino en el sector energía pues, en el 2020, Luz del Sur fue vendida al grupo China Three Gorges Corporation, empresa del Estado chino.
Para despejar las dudas y arrojar luz sobre el asunto del monopolio de energía eléctrica en Lima, Infomercado conversó con Erick García Portugal, experto en Energía y ex Director General de Hidrocarburos del Ministerio de Energía y Minas (Minem).
«Lo primero que debemos tener en cuenta que la distribución eléctrica es un mercador regulado y la regulación está a cargo del Osinergmin, encargado de ver las tarifas y es quien debe emitir un informe no vinculante, donde debería decir si esta adquisición impactan o no en el desarrollo del mercado y la determinación de las tarifas«, explicó García Portugal.
Asimismo, el experto también destacó que el mercado de distribución eléctrica es un monopolio natural, el cual busca ser aprovechar una mayor economía de escala que debería traducirse en menores tarifas de distribución (VAD) y mejora de la calidad.
«La distribución es un monopolio natural. Y un monopolio natural no es malo porque es regulado y lo que busca es tener economía de escala en beneficio del usuario, o sea, más volumen y menor costo. Cabe precisar que tener muchas empresas de distribución en un área geográfica, incrementaría los costos y por consecuencia las tarifas, siendo ineficiente, señaló el experto en energía.
Sin embargo, García señaló que se puede mejorar aún más la competencia y las tarifas del usuario, si es que se implementa la figura del distribuidor y del comercializador de manera separada, sin embargo actualmente la empresa de distribución tiene ambos roles en el mercado.
«Para generar competencia en el mercado de distribución eléctrica, está la figura del distribuidor que se encarga de distribuir con una tarifa fijada por el Osinergmin; y también está la figura del comercializador que es el que comercializa, emite los recibos y busca los clientes, y si hay muchos comercializadores, se genera competencia en favor del usuario. En cambio, en el Perú, no se ha implementado la figura de los comercializadores en todas las regiones, por ejemplo, a la fecha se cuenta con pocas empresas comercializadoras, que han tenido problemas de acceso a redes por el distribuidor porque tiene una posición de dominio, lo cual no permite generar competencia», comentó Erick García.
Definir el modelo de tarifario
García Portugal expresó sus preocupaciones sobre el modelo tarifario actual en Perú y sobre la reglamentación del sector de distribución, han pasado 30 años y no se ha habido cambios, señalando que hay espacio para mejorar. Cabe precisar que a la fecha se cuenta con una propuesta de mejoras del sector eléctrico elaborada por la Comisión para la Reforma del Subsector Electricidad-CRSE.
Además, consideró que estas mejoras deben implementarse en beneficio de la población y las empresas. Todo es perfectible.
El especialista explicó que el modelo actual de «empresa eficiente» del Osinergmin tiene algunas limitaciones, y no considera todas las actividades que realiza una empresa y puede limitar las mejoras en la calidad y acceso al servicio, lo que puede resultar un perjudicial para el usuario final.
Agregó que su preocupación va por la falta de pronunciamiento del Osinergmin sobre este tema y la falta de previsibilidad por parte del Minem para la implementación de las propuestas de mejora de la CRSE.
Según García, «es una gran oportunidad para el país en mejorar el modelo actual de regulación implementando las recomendaciones de la CRSE ». Por lo tanto, instó al ente regulador a revisar las propuestas de la CRSE y al Minem para mejorar el mercado energético peruano y generar incentivos para la mejora continua.
