Hoy en día, los juegos online son mucho más que una simple forma de entretenimiento; son una industria multimillonaria en pleno auge. Las empresas están empezando a darse cuenta del potencial que ofrece este mundo digital, esperando a ser explotado. De hecho, el mercado de los juegos online está proyectado para alcanzar los 200 mil millones de dólares en los próximos cinco años. Pero claro, la pregunta del millón es: ¿cómo pueden aprovecharlo?
¿Una moda pasajera o el futuro del entretenimiento?
Los videojuegos ya no son cosa de niños. En la actualidad, resulta que ser gamer o estar relacionado con la industria te puede llevar a muchos lados.
Con la expansión de internet y la mejora de las tecnologías móviles, jugar online nunca ha sido tan fácil. Puedes estar en la sala de espera del dentista y echarte unas partidas al casino en vivo, o quedarte en casa y meterte de lleno en una experiencia inmersiva con amigos que están a kilómetros de distancia. Todo es cuestión de tener un buen dispositivo y una conexión decente.
Este fenómeno ha hecho que las empresas también empiecen a tomar nota. Y es que no importa si vendes accesorios de gaming o si tienes una empresa de software: si inviertes en la experiencia de juego, puedes llegar a millones de personas que buscan algo más que entretenimiento.
Mejorando la experiencia de usuario
Antes de lanzarte a crear el próximo Fortnite, hay algo que necesitas tener en mente: la experiencia del usuario lo es todo. Si el juego es frustrante, lento o aburrido, la gente simplemente lo dejará.
Aquí es donde entra en juego la inteligencia artificial (IA). ¿Has notado cómo Netflix siempre sabe qué recomendarte? Pues en los juegos online pasa lo mismo. La IA puede ayudar a adaptar la experiencia para cada usuario, hacer que el juego se ajuste a lo que te gusta y ofrecerte retos que te enganchen más. Además, la realidad aumentada (AR) y la realidad virtual (VR) están llevando las experiencias de juego a otro nivel.
Las empresas que están apostando por estas tecnologías no solo están innovando, sino que también están creando fidelidad. Porque cuando un jugador siente que la plataforma entiende sus gustos y le ofrece algo que disfruta de verdad, es mucho más probable que vuelva una y otra vez.
Marketing digital
Tener un buen juego es solo el primer paso. Si nadie lo conoce, básicamente es como no tener nada. Por eso, el marketing digital es crucial. Pero no cualquier marketing. Hablamos de estrategias bien pensadas y, sobre todo, adaptadas a los gamers.
Las redes sociales son una de las mejores herramientas que puedes usar para atraer a nuevos jugadores. Piensa en Instagram, YouTube y Twitch. En estas plataformas, hay millones de personas que ven, comparten y hablan sobre videojuegos todo el tiempo. Si trabajas con influencers del mundo gaming, tienes medio camino recorrido. Ellos tienen esa conexión con su comunidad que las marcas no siempre pueden lograr por sí solas.
Monetización
Este es el verdadero meollo del asunto, porque si no sabes cómo monetizar, te quedas a medias. Afortunadamente, el mercado de los juegos online ofrece varias formas de ganar dinero.
Una de las estrategias más populares son las compras dentro del juego. Seguro que has visto cómo algunos jugadores gastan dinero en skins, mejoras o ítems especiales. Y aunque mucha gente disfruta de jugar sin pagar un centavo, hay quienes están dispuestos a gastar para mejorar su experiencia de juego.
Otro modelo que está pegando fuerte es el de las suscripciones. Servicios como Xbox Game Pass ofrecen acceso a una biblioteca completa de juegos a cambio de una tarifa mensual. Y para los jugadores que prefieren tener todo a mano, es una opción súper atractiva.