El Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur) prevé que para finales del 2020 la llegada de visitantes extranjeros se desplome en un 80%. El turismo interno no es ajeno a este desplome, el Mincetur proyectó una caída del 70%.
La pandemia del COVID-19 ha golpeado fuerte al sector turístico, que emplea a 1,4 millones de trabajadores formales y, aproximadamente, a 2 millones en el sector informal, según cifras de la Cámara Nacional de Turismo.
En el caso de la región Piura, una de las zonas más afectadas es el distrito de Catacaos.
Cada año la ciudad acoge a miles de turistas, quienes la visitan debido a su gastronomía, festividades y artesanías.
A pocos días del inicio de la fase 4 de la reactivación económica, estas son las historias de quienes con sus manos preservan parte de nuestra cultura y afrontan la crisis solos.
Artesanos olvidados
La Asociación de Artesanos de Catacaos (ASARCAT) reinició actividades desde hace tres semanas en su local frente a la iglesia San Juan Bautista.
Los artesanos trabajan y reciben clientes tomando las medidas de seguridad sanitarias, como instalar un lavatorio o el uso de alcohol y mascarillas.
José Sullón, miembro de ASARCAT y joyero ganador del premio Presidente de la República, comenta que eran 50 los artesanos que trabajaban antes de la pandemia en el local de la asociación. Actualmente, son solo 10, entre hombres y mujeres, lo que han regresado a vender.
«Algunos han dejado su arte para buscar trabajo en otro lado», indica. El joyero añade que muchos han ingresado al rubro de la construcción o de la agricultura para poder subsistir junto a sus familias.
Asimismo, quienes trabajan en el local no tienen aseguradas las ventas. «Algunos vienen y no venden nada«, asegura Sullón.
A pesar de contar con recursos limitados, José Sullón busca innovar. Explica que planea replicar las piezas artísticas que le permitieron ganar distintos concursos a nivel regional y nacional.
Aunque aún les falta gestionar su presencia en internet, el joyero señala que pueden contactarlos a través de la página de facebook de la asociación o a través de su perfil personal.
«Nos sentimos olvidados por las autoridades. El artesano siempre es olvidado. Queremos que nos vean», finalizó el joyero.
Tejedoras en crisis
María Mendoza, presidenta de la Asociación de Artesanas de Narihuala – Pedregal Chico, indica que las tejedoras de paja toquilla, a pesar de la reactivación, no tienen pedidos ni ventas.
La asociación ha reabierto su tienda frente al complejo arqueológico Narihuala pero no obtienen ganancias debido a la falta de turistas.
«Las madres están desesperadas porque no pueden vender sus productos, y la materia prima no está viniendo», señala la presidenta.
Mendoza explica que durante un mes podían ganar hasta S/10,000, cumpliendo pedidos para comerciantes peruanos y extranjeros. Las ganancias eran distribuidas entre los miembros. Ahora, no cuentan con ingresos, lo que ha paralizado la actividad.
«Estábamos tejiendo productos para la feria Ruraqmaqui en el Museo de la Nación en Lima, pero llegó la pandemia y no se pudo», señala.
La Asociación de Artesanas de Narihuala desean incursionar en el mundo de las ventas virtuales pero Mendoza comentan que no cuentan con el capital para estructurar una página o realizar delivery.
Alfareros
José Santos, miembro de la Asociación de Alfareros de Simbilá, señala que los 20 artesanos de la Casa del Alfarero han retornado a trabajar.
Santos agrega que la asociación recibió un pedido de ollas, fuentes y jarras para Lima, lo que les ha permitido afrontar la falta de turismo.
Además, planean incursionar en el mundo digital. El alfarero indicó que pronto contarán con una página en facebook o un número de WhatsApp, donde sus clientes podrán comunicarse.
En esa línea, Santos agregó que también están introduciendo nuevas creaciones, como las jardineras cuadradas o los hornos, como nuevos productos.
José Santos pidió a las autoridades
Cabe señalar que es común en los tres artesanos el desconocer acerca de los créditos FAE-Turismo. El programa del Estado, que busca reactivar la economía de las mype que se han visto afectadas por el descenso del turismo, parece tener dificultades para darse a conocer en los sectores más vulnerables.
Iniciativa local
Víctor Yarleque, propietario de Yares Joyero SRL, notó que la falta de turistas generaría grandes perdidas para los artesanos y las familias de Catacaos.
Por ello, emprendió la feria artesanal virtual Catacaos Renace. La iniciativa ciudadana pone a la venta los productos de alfareros, tejedoras, joyeros y otros artesanos del distrito.
La segunda edición se realizará a través del perfil de Facebook de Yares Joyero SRL, el día 26 de setiembre a las 4 p.m.
