Tisur viene enfocando sus esfuerzo en mejorar el desempeño del terminal portuario de Matarani. Esta vez, centrado en dos objetivo: contenedores y carga boliviana.
Los contenedores, pese a que son una carga muy importante para el terminal, aún no logran alcanzar grandes volúmenes por falta de navieras. Mientras que, la carga boliviana ha generado grandes expectativas por tener una posición estratégica, explicó a Gestión, Mauricio Núñez del Prado, gerente general del Terminal Internacional del Sur (Tisur).
Actualmente, el puerto de Matarani posee una capacidad instalada que permitiría alcanzar volúmenes más grandes a los ocupados. Es decir, puede mover 100 mil contenedores al año, pero solo llegan a 20 mil.
Además, algunas de las principales empresas que atienden en el país son las mineras Cerro Verde, Las Bambas, Antapaccay, Hubday y Marcobre. Mientras que en Bolivia, aún son pocos volúmenes los que atienden, sobre todo de concentrados de zinc.
Limitaciones del sector
«El sur del país tiene un movimiento importante de productos de importación y de exportación vía contenedores, pero que por la falta de líneas navieras terminan canalizándose por el puerto del Callao«, señaló el ejecutivo.
Esto, perjudica al sector, pues las grandes empresas requieren puertos con mayor volumen. Además, el 80% de los contenedores a nivel nacional ingresan por el puerto del Callao.
En ese sentido, las líneas navieras buscan potenciar su operatividad de importadores y exportadores pequeños, que estando cerca al puerto de Matarani, deben recorrer más kilómetros para enviar su mercadería.
Cabe destacar que, por ahora Matarani tiene solo una naviera operativa: Hapag-Lloyd, pues por la pandemia dejó de recalar Evergreen.
«Venimos gestionando desde la parte comercial para recuperar nuestra segunda línea y seguir en la lucha», acotó Nuñez.
Inversiones de Tisur
Por otro lado, durante el 2023, Tisur pretende renovar algunos equipos menores, realizar mantenimiento a la infraestructura, entre otros proyectos. Todo esto, representará una inversión de US$6 millones al cerrar el año.
Cargas bolivianas
En 2022, la carga de Bolivia dejó los mejores resultados de los últimos 5 años, alcanzando las 400 mil toneladas en importaciones y exportaciones, cifra que esperan replicar en 2023.
«Sin embargo, durante el primer trimestre tenemos una afectación proyecta de 150 mil toneladas, estimando que la paralización de estos casi 90 días nos prejudicarían alrededor de U$2 millones en carga«, resaltó el representante de Tisur.
Los principales envíos de Bolivia tienen destino al norte de Chile, a donde llega soya, fierro y material de construcción traído de Asia.