El Poder Judicial ordenó a Integratel, antes conocida como Telefónica del Perú, pagar 309.4 millones de soles a América Móvil, operadora de la marca Claro, luego de determinar que la empresa incurrió en prácticas anticompetitivas a inicios de la década del 2000.
La sentencia, emitida por el 36° Juzgado Civil de Lima, establece que la compañía deberá abonar también los intereses legales y los costos del proceso. La cifra equivale a unos 86.9 millones de dólares al tipo de cambio actual.
Antecedentes de la sanción
Según explicó al diario Gestión el abogado de América Móvil, Adrián Simons, el origen del caso se remonta a 2002, cuando el Organismo Supervisor de Inversión Privada en Telecomunicaciones (Osiptel) sancionó a Telefónica del Perú con más de un millón de dólares por infringir la normativa de competencia.
Las infracciones detectadas incluyeron el desvío internacional de llamadas de Larga Distancia Nacional (LDN) de abonados fijos, la negativa a transportar llamadas de red inteligente desde teléfonos fijos, el bloqueo del acceso a los números 108 y 109, y la negativa a cursar llamadas desde teléfonos públicos hacia la red fija de Claro, entonces operada por Telmex.
Estas prácticas afectaron la capacidad operativa y de interconexión de Telmex, antes de que América Móvil la adquiriera y lanzara la marca Claro en el país en 2005.