Miami, el reluciente epicentro del sur de Florida, se erige como un imán para inversores peruanos en busca de oportunidades inmobiliarias. Según la Asociación de Empresas Inmobiliarias del Perú (Asei), el 3% de las transacciones inmobiliarias en Florida durante 2022 fueron realizadas por compatriotas, un indicador del creciente interés en este mercado.
En este contexto, es esencial desmitificar el proceso de inversión, desde la identificación del tipo de inversionista hasta la selección de la propiedad adecuada.
Descubre tu identidad financiera
Antes de sumergirte en el mundo de las inversiones inmobiliarias, es crucial comprender si tu perfil de inversor es pasivo o profesional.
Para los inversores pasivos, aquellos que buscan oportunidades accesibles con un capital limitado, la opción de comprar propiedades para alquilar a largo plazo puede ser la más adecuada. Gustavo Gálvez, CEO de PFS Realty Group, sugiere que basta con tener los fondos disponibles, y el prestamista brindará el respaldo financiero necesario. En este enfoque, la rentabilidad se obtiene a través de alquileres o renovación para futuras ventas.
Por otro lado, los inversionistas profesionales, con experiencia y recursos sustanciales, tienen la capacidad de embarcarse en proyectos de mayor escala, como la compra de terrenos para el desarrollo de nuevos proyectos inmobiliarios.
Analizar tu situación financiera, metas y nivel de experiencia determinará la ruta más apropiada para ti.
Miami: Desmitificando los préstamos inmobiliarios para extranjeros
Contrario a la creencia común, el proceso de adquirir una propiedad en Miami no es tan complicado como se piensa. Gustavo Gálvez, con su experiencia en PFS Realty, destaca la simplicidad del acceso a créditos hipotecarios para extranjeros. La documentación necesaria incluye una visa de turismo tipo B1 o B2, extractos bancarios que evidencien la propiedad de fondos, y certificaciones contables o laborales. El proceso, desde la solicitud hasta el desembolso del dinero, puede demorar aproximadamente 60 días.
Uno de los mitos prevalentes es que se necesita una visa de inversionista para acceder a préstamos hipotecarios en Estados Unidos. Gálvez desmiente esta noción, afirmando que una visa de turismo es suficiente.
Además, los bancos estadounidenses otorgan préstamos de hasta el 70% del valor de la propiedad con mayor facilidad cuando se utiliza una filial de una inmobiliaria. Este enfoque simplifica y asegura el proceso, ofreciendo un acceso más rápido y seguro.