Finanzas

¿Qué factores retrasan el crecimiento económico?

El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) resalta que, a pesar de los años de bonanza del Perú, los problemas que enfrentan sus ciudadanos no fueron resueltos.
Por Alessandra Rosas Namuche
3 minutos

La pandemia de la COVID-19 constituye la mayor crisis sanitaria, humanitaria y económica que Perú haya enfrentado en su época moderna.

En el plano económico, el país será uno de los más afectados del mundo, con una contracción del producto interno bruto (PIB) de -12% en 2020, según el Banco Mundial (2020) y el Banco Central de Reserva del Perú (2020).

Aunque existen proyecciones más pesimistas, como las del Fondo Monetario Internacional (FMI), que estima una contracción de entre -13% y -14%, o Seminario, Palomino y Pastor (2020), que proyectan una recesión de -18% en la economía peruana.

Así lo señala el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en su último reporte “La formalización del empleo, la protección de las familias y la construcción de una sociedad más igualitaria”

“Antes de la llegada de la COVID-19, el país enfrentaba problemas estructurales que no fueron debidamente abordados durante la fase de bonanza económica experimentada en las últimas décadas.”, indica el informe.

Muestran que durante el periodo 2004-2013 la economía peruana creció a un ritmo del 6% en promedio.

Mientras que en el periodo 2014-2019 experimentó una marcada desaceleración, con una tasa de crecimiento promedio igual al 3%.

Informalidad

Según el BID, uno de los factores clave que retrasa el crecimiento de la economía es el gran tamaño del sector informal.

Ya que genera enormes pérdidas de productividad debido a los incentivos que tienen para producir a baja escala y evitar ser detectadas.

Cabe señalar que, el sector informal genera distorsiones en el mercado laboral, reduciendo la productividad total de los factores.

Y a pesar del éxito macroeconómico, los niveles de informalidad laboral han permanecido prácticamente constantes entre 2004 y 2019. Apenas reduciéndose del 80% al 72%.

Pobreza monetaria

Un segundo problema que enfrenta Perú es el alto grado de vulnerabilidad económica al cual están expuestos los hogares.

Según lo señala el reporte del BID, el crecimiento económico ha contribuido a reducir de manera considerable los niveles de pobreza monetaria.

Del 59% que se registraba en 2004 se redujo a 20% en 2019, y  la clase media  pasó de un 19% en 2004 a un 41% en 2019.

Sin embargo, alrededor del 20% de la población se encuentra por encima de la línea de pobreza, pero por debajo del nivel promedio de gasto per cápita (S/ 695 mensuales por persona), por lo que cualquier shock exógeno sobre sus niveles de ingresos podría regresarlos a la pobreza, conforme lo indica el Banco.

Fuente: Banco Interamericano de Desarrollo

Desigualdad

Un tercer aspecto de la realidad pre-pandemia es que la sociedad es aún muy desigual.

El índice de Gini de ingresos, el cual es utilizado para medir el grado de desigualdad monetaria, se ha reducido de 0.50 a 0.41 durante el periodo 2007-2019.

Asimismo, según la Encuesta Nacional de Hogares (ENAHO), el decil más rico de la población (10%) concentra el 34% de los salarios. Esta situación se traduce en un acceso diferenciado a servicios públicos básicos, como educación, salud, y agua y saneamiento, entre otro

Y de acuerdo con el reporte del BID, estos problemas estructurales y persistentes quedaron rápidamente en evidencia debido a la pandemia por COVID-19.

Fuente: Banco Interamericano de Desarrollo

De igual modo el informe señala que, para evitar que los efectos a corto plazo tengan repercusiones duraderas, se necesita tanto un conjunto de acciones para atender la emergencia.

Como por ejemplo, una serie de políticas que garanticen la reapertura y la recuperación segura e inclusiva.

Publicidad

Por Alessandra Rosas Namuche