Emprendimientos

Oh My Cake: Repostería personalizada hecha en casa para todos los piuranos

En el año 2014, Andrea Coronado Trelles se encontraba estudiando y trabajando en Lima. A la par de estas dos actividades, decidió emprender un negocio de venta de cupcakes con el fin de generar ingresos adicionales sin saber que, seis años después, su emprendimiento sería uno de los más conocidos en su ciudad natal, Piura, y su rubro se ampliaría.
Por Betsabé Saavedra Publicado: Últ. actualización: 10 noviembre, 2020 22:19
4 minutos

En el año 2014, Andrea Coronado Trelles se encontraba estudiando y trabajando en Lima. A la par de estas dos actividades, decidió emprender un negocio de venta de cupcakes con el fin de generar ingresos adicionales sin saber que, seis años después, su emprendimiento sería uno de los más conocidos en su ciudad natal, Piura, y su rubro se ampliaría.

Luego de un año de dedicarse a la venta de cupcakes, y con un poco más de experiencia, Andrea Coronado Trelles fundó Oh my cake. En el 2015, Andrea retornó a Piura decidida a enfocarse al 100% a su emprendimiento y a ampliar su público objetivo.

«El nombre de mi negocio viene después de una larga conversación con mi prima. Pensamos en nombres diferentes y poco comunes. Me gustó mucho que sea en inglés y que el “Oh my” suene como una exclamación del conocido «Oh my God!», que significa Oh Dios mío», cuenta la emprendedora, quien es chef de profesión.

Pastelería personalizada

«Oh my cake se trata de sorprender y generar más sonrisas en el mundo. ¿Cómo?, convirtiendo nuestros postres en detalles, llenos de mensajes que puede personalizar nuestro cliente, para volver un postre, un regalo. Oh my cake es que nos dejen contarles lo dulce que es la vida cuando hay un postre de por medio», recalca Andrea Coronado.

Esto se debe, según Andrea, a que el 80% de sus clientes es detallista. Por eso, la mayoría de sus postres se convierten en detalles.

Como todo emprendedor, el empeño y dedicación es clave para sacar adelante un negocio. Esto fue lo que Andrea debía tener en cuenta a sus 20 años, edad en que fundó Oh my cakeAl igual que muchos negocios, la colaboración de sus amigos y familia, fue clave.

«Yo empecé en la cocina de mi casa, sin mucha inversión, y sobretodo sin saber lo que iba a ser manejar un negocio desde cero a mis 20 años. Lo importante es seguir hasta lograr posicionar tu marca. Cuando consigues esto, empiezan a buscarte clientes que ya no conoces ni ellos a ti», sostiene la propietaria de Oh my cake.

Su colaboradora clave en este negocio es su madre, Karla Trelles, quien se asoció a Andrea el 2018 y, desde esa fecha, se dedica al 100% a Oh my cake.

«Definitivamente su paciencia, dedicación y la buena relación que desarrolla con los clientes es súper valioso para la empresa. Me apoya en todas mis ideas. Ella es mi mano derecha y aprendió a hacer los postres hasta más ricos que yo», recuerda.

Carta

Oh my cake cuenta con una amplia carta de productos, como brownies, alfajores, cheesecakes, pies (de limon y de maracuyá), tortas (de chocolate, tres leches, cinco leches y temáticas), carrot cake, cupcakes y bocaditos (dulces y salados).

De acuerdo con la emprendedora, sus productos fuertes y más solicitados son los brownies y alfajores (personalizados), los mismos con los que comenzaron.

Asimismo, asegura que la clave de su negocio es que nunca ha reemplazado los ingredientes para simplificar los procesos, pues continuan utilizando productos de calidad, sin caer en la repostería industrial. A esto se suma que toda la personalizacion de sus productos es hecha a mano, totalmente personalizado por y para el cliente.

Pandemia

Debido a la pandemia de la Covid-19, Oh my cake estuvo cerrado durante tres meses sin poder generar ningún ingreso. Sin embargo, la decisión más difícil que Andrea y Karla tuvieron que tomar fue el cerrar su local, en donde estuvieron por dos años.

«Tuvimos que aceptar que manejaríamos el negocio solo mediante delivery, por eso decidimos que el local ya no era necesario. Nos dimos cuenta que desde nuestro taller podíamos atender fácilmente. Fue duro aceptarlo, pero a la larga nos benefició muchísimo», señala.

Para Andrea, emprender no es fácil, pero rendirse tampoco es una opción. En los cinco años que lleva con su negocio, ha aprendido a que si persistes, en lo que sea que hagas, perseveras y eres constante, y mejor aún si te apasiona lo que haces, el éxito llega.

Ahora, la proyección que Andrea tiene para su negocio es llevarlo por todo el Perú, exactamente a Lima y a Cusco. A esto se suma volver a tener un local en Piura, donde todo comenzó. «Es algo que visualizó mucho a diario y trabajamos para a largo plazo cumplirlo», finaliza.

¿Cómo puedo realizar un pedido?

Facebook: Oh my cake
Instagram: ohmycake.peru
WhatsApp: 931 821 423 o 949 699 412.

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Por Betsabé Saavedra