En 1942, Leche Gloria decidió utilizar hojalata para envasar la popular leche evaporada. Se buscaba un material que fuese resistente a los diversos climas y terrenos que existen en el Perú y que permitiera, a su vez, proteger el producto a lo largo de cada traslado. La icónica lata llegaría para quedarse hasta la actualidad.
Hoy, próxima a cumplir 80 años, Leche Gloria anuncia que renueva su compromiso ecoamigable de continuar produciendo y utilizando la hojalata para su principal producto lácteo como el envase de alimentos más resistente, seguro y ecológico.
Sus propiedades magnéticas facilitan su recolección y reciclaje; hay una fácil degradación del metal cuando está en desuso, y sus desechos pueden reutilizarse hasta en un 100%.
Los envases de hojalata sellados al vacío permiten ser resistentes ante cualquier impacto, pues soportan más de doscientos kilos encima. A su vez, el envase evita el ingreso de luz ultravioleta y oxígeno con lo cual la leche conserva todas sus vitaminas y atributos, e impide la formación de microorganismos.
“Tenemos una ambiciosa agenda de sostenibilidad en la compañía. Utilizar envases que reduzcan su impacto en el medio ambiente es una prioridad. Seguiremos utilizando nuestro envase estrella por muchos años más”, señala Juan Carlos Belaunde, director de Asuntos Corporativos y Responsabilidad Social de Leche Gloria S.A.
Además, el ejecutivo destaca que en este 2022 la agenda de sostenibilidad incluye mejores prácticas en el cuidado del agua y desechos, año en el que la empresa cumple 80 años de operación en el país.
La lata de leche evaporada ha permitido a muchas familias acceder a un alimento nutritivo que llega en las mejores condiciones a los rincones más alejados del país, elemento central para cumplir el propósito de Leche Gloria: combatir los retos nutricionales del Perú y el mundo con productos de alta calidad que saben a Gloria.