Por octavo año consecutivo, el Instituto Peruano de Economía (IPE) presentó el Índice de Competitividad Regional –INCORE 2020, como parte de su esfuerzo por analizar los avances en el desarrollo económico y social de las regiones del Perú.
Estos están compuestos por cuarenta indicadores, lo que permite evaluar el rumbo que está tomando cada región, así como identificar sus principales fortalezas y debilidades.
De esta manera, los resultados indican una relación directa entre competitividad y desarrollo económico y social.
En ese sentido, de las ocho regiones menos competitivas siete también son las más pobres.
Es así que las regiones más competitivas son Lima, Moquegua y Tacna.
Mientras que las regiones menos competitivas son Huancavelica, Puno y Cajamarca.
Entorno Económico
Lima, Moquegua y Arequipa lideran el desempeño en este pilar. Por otro lado, Huancavelica, Puno y Huánuco ocupan los últimos lugares.
Cabe recordar que este pilar se puede dividir en dos categorías. Primero, se encuentran los indicadores que miden la actividad económica en la región.
Como el PBI, PBI per cápita, stock de capital por trabajador y el presupuesto público.
Por otro lado, están los indicadores que miden la capacidad de sus habitantes de satisfacer sus necesidades, a través de mayores niveles de consumo y el acceso a servicios financieros.
Salud
En primer lugar, se analiza el estado general de la salud y el acceso a servicios salud de la población por medio de la esperanza de vida al nacer y la cobertura de personal médico.
En segundo lugar, el estado de la salud infantil se aproxima través de indicadores como la desnutrición crónica, la prevalencia de anemia y vacunación.
Por último, la salud materna comprende la proporción de partos institucionales en cada región.
Lima, Moquegua y Tacna lideran el pilar Salud, en contraste, Loreto, Puno y Huancavelica ocupan los últimos lugares.
Educación
La medición de la competitividad en Educación se divide en dos ámbitos.
Por un lado, están aquellos aspectos particulares de la población en edad escolar, como son la asistencia escolar, el rendimiento académico (en primaria y secundaria) y la calidad de la infraestructura escolar (acceso a servicios básicos e internet).
Por otro lado, se incluyen indicadores educativos de la población adulta en general como son analfabetismo y población con educación secundaria o superior.
Es así que Tacna, Lima y Arequipa lideran este pilar; mientras que, Loreto, Huánuco y Cajamarca ocupan los últimos lugares.
Laboral
Con respecto a este pilar, Lima, Ica y Madre de Dios fueron las regiones más desarrolladas en este ámbito.
Mientras que las regiones menos competitivas fueron Puno, Cajamarca y Huancavelica.
El pilar Laboral comprende tres aspectos. En primer lugar, se encuentran los indicadores relacionados al nivel de ingresos de la población a través de su trabajo y su inequidad según género.
Por otro lado, están los indicadores como empleo adecuado o empleo informal, que miden la calidad del empleo al que tiene acceso la población.
Finalmente, el indicador fuerza laboral educada busca captar el nivel de capital humano de los trabajadores de la economía.