Diana Zapata Espinoza es licenciada en Psicología, con un posgrado en Psicología Clínica Cognitiva por la Universidad Católica de Uruguay y tiene Especialización en Psicoterapia de Pareja y sistemas vinculares.
Infomercado conversó con Diana Zapata acerca de la salud mental por la pandemia de la COVID-19, cómo afecta el rendimiento laboral de los trabajadores en las empresas y la importancia que los empleadores deben darle al tema.
¿Cuánto ha afectado la pandemia a la salud mental de los trabajadores?
Bueno, la pandemia ha afectado muchísimo y además ha visibilizado la necesidad de buscar ayuda profesional. Los trabajadores están bajo situaciones que la pandemia ha ocasionado como procesos de duelo por pérdidas de familiares. Ahora mismo por el motivo que trabajan desde casa, prácticamente no hay una separación, no se puede discriminar entre lo que es la vida laboral y la vida personal.
Entonces de 10 trabajadores, yo diría que unos 7 están con niveles de estrés muy altos. El estrés afecta directamente la concentración de los trabajadores y no son capaces de tomar decisiones y esto merma en el terreno laboral. La pandemia no solo ha traído estrés sino también depresión, bajo estado de ánimo y ansiedad.
¿Cree que en este año haya un aumento o disminución de afectación a la salud mental de la gente?
Yo creo que va a aumentar pues en esta tercera ola hay un incremento de personas con altos niveles de ansiedad y falta de motivación que se traduce en síntomas depresivos, en todo caso va a mantenerse o elevarse, de todas maneras.
¿Cuán importante es la salud mental en el tema laboral?
Es primordial, desde la parte neurológica, el estrés, la depresión, la ansiedad, todos merman en el cuerpo de la persona y van a influir en su nivel de concentración. Las personas con estos problemas van a tener un menor rendimiento que aquellas personas que tiene un mayor autocuidado mental integrado y que realizan actividades tanto físicas como para su bienestar emocional.
Lo que ha hecho la pandemia es visibilizar la poca atención que le prestamos a la salud mental cuando en realidad es el eje que nos va a sostener para poder realizar todas nuestras actividades cotidianas.
Es por ello que algunas empresas grandes están optando por atender la salud mental porque se han dado cuenta que esto permite que el rendimiento de los trabajadores se optimice.
¿Qué deberían hacer las empresas para sacar el 100% de sus trabajadores?
Primero, hacer tamizajes y encuestas para ver el estado actual de salud mental de sus trabajadores. En base a los resultados poder implementar talleres psicoeducativos, líneas de consejería psicológica, de apoyo emocional, pero no todas las empresas lo hacen pues no. Esto en cuanto a prevención.
Luego viene el trabajo de intervención que ya se trata de intervenir en aquellos trabajadores que ya están presentando secuelas de la misma pandemia, porque muchas de estos trabajadores refieren que es a raíz de la pandemia que están así.
¿Estos problemas de salud mental se trasladan al ambiente familiar?
Totalmente, los pacientes que yo tengo que son trabajadores de empresas grandes tienen muchos de estos problemas. El estrés no discrimina los espacios. El estrés es una energía que se va acumulando y la persona la termina sacando en otros aspectos de su vida, claro está, en el ambiente familiar.
¿El Estado está brindando la importancia necesaria a la salud mental en la coyuntura actual de pandemia?
Bueno, hay un aumento de los CEM, los centros comunitarios de salud mental pero no abastece la demanda de la población y además, ahora mismo, el seguro de salud no ofrece facilidades como para que las personas puedan acercarse, entonces hay que seguir trabajando para implementar nuevos centros y espacios que sean accesibles a la persona. Porque no todas las personas tienen acceso a internet, por ello deberían implementar más líneas de apoyo psicológico y seguir trabajando bajo los contextos sociales que nos ofrece un país como Perú.