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¿Cuáles son las startups más populares del mundo?

Conoce cuáles son las startups más populares del mundo y las claves que les permitieron alcanzar su éxito comercial.
Por Infomercado
6 minutos
cuáles son las mejores startups más populares del mundo

Los emprendedores de éxito encuentran una oportunidad de mercado y la aprovechan. Sin embargo, las startups de más éxito van más allá de simplemente identificar un punto de dolor y resolverlo. Ya se trate de una startup de aprendizaje automático, de software empresarial o de reparto de comida, las startups de éxito crecen gracias a la perseverancia y a la capacidad de superar retos.

Si buscas inspiración empresarial para mejorar el éxito de tu startup, estás en el lugar adecuado. Una de las mejores formas de motivarte para lanzar la tuya es inspirarte en las historias de las startups con más éxito. No tiene que ser sobre un sector específico ya que va desde reparto de comida a domicilio a ofrecer entretenimiento online a través de juegos de blackjack.

Como muchos emprendedores pueden decirte, crear una startup de éxito no es fácil. Cada uno de estos fundadores tiene su propio camino hacia el éxito, que incluye tanto fracasos como triunfos de los que aprender y crecer. En este artículo, echamos un vistazo a las startups más populares del mundo.

Airbnb

La historia de una de las startups de mayor éxito es, sin duda, Airbnb. Sus fundadores, Brian Chesky y Joe Gebbia, lanzaron el sitio en 2007 cuando, tras mudarse de Nueva York a San Francisco, observaron la afluencia de visitantes a la ciudad durante la conferencia de Diseño Industrial y la escasez de hoteles disponibles. Ni que decir tiene que vieron en ello una oportunidad de ganar dinero adicional alquilando su espacio y así nació el concepto de Airbnb.

Sin embargo, Airbnb no fue un éxito de la noche a la mañana. Los fundadores de Airbnb tardaron años en recibir financiación y aún más en obtener beneficios, lo que requirió resistencia y un poco de trabajo extra para llegar a fin de mes. Hoy, la capitalización bursátil de Airbnb supera los 74,000 millones de dólares, y es un testimonio del concepto de perseverar en una gran idea. Airbnb nos demuestra que las grandes ideas a menudo implican buscar una solución a un problema común.

Instagram

Instagram, por su parte, experimentó un rápido crecimiento desde el principio. Su fundador, Kevin Systrom, fundó Instagram, la aplicación para compartir fotos, con el nombre de Burbn y acumuló 25,000 usuarios en un solo día. Esto se debe en parte a que Systrom consiguió financiación de capital riesgo desde el principio para lanzar la aplicación. Además, la función de compartir fotos era única y emocionante en ese momento, ya que muchas aplicaciones se centraban más en compartir la ubicación.

El verdadero éxito llegó cuando la empresa cambió el modelo de negocio, pasó a llamarse Instagram y se lanzó para iOS. Instagram consiguió 100,000 usuarios en la primera semana y un millón menos de dos meses después. Lo que Instagram hizo bien fue reconocer un elemento que faltaba en las aplicaciones de redes sociales de la época y pivotar el modelo de negocio para acceder a un mercado mayor.

Mailchimp

El objetivo de Mailchimp, sorprendentemente, no era necesariamente lograr el crecimiento masivo que ha alcanzado, sino simplemente ayudar a sus clientes proporcionándoles los servicios que necesitan. Los fundadores, Ben Chestnut y Dan Kurzius, dirigían una empresa de diseño web cuando varios clientes les preguntaron cómo podían incorporar el marketing por correo electrónico a su sitio web.

Tras utilizar código antiguo que uno de los fundadores había desarrollado para un proyecto anterior, pudieron crear Mailchimp como un proyecto paralelo que acabaría convirtiéndose en una empresa valorada en unos 4.200 millones de dólares. La decisión de dedicarse a su proyecto paralelo, Mailchimp, se debió a la falta de pasión por su negocio anterior y al deseo de ayudar a las pequeñas empresas a triunfar. Está claro que esta idea dio sus frutos.

Uber

La historia del éxito de Uber está plagada de rápido crecimiento, controversia e inspiración para emprendedores nuevos y experimentados. La idea de Uber, la popular aplicación de viajes compartidos, fue desarrollada por Travis Kalanick y Garrett Camp, dos fundadores de startups de éxito, en 2008. Cuando los fundadores fueron incapaces de encontrar un taxi una noche de invierno en París, desarrollaron la solución a su propio problema: la posibilidad de pedir un viaje desde el teléfono.

Uber Technologies se creó oficialmente en 2009 y rápidamente se convirtió en la startup más valiosa del mundo. Ahora, la empresa ha comprado a varios de sus competidores en diversos sectores, como Lime y Postmates. Lo que empezó como una solución a un problema generalizado se convirtió en una auténtica mina de oro para los emprendedores que la hicieron realidad.

Pinterest

El siguiente ejemplo de startups de éxito es Pinterest. A diferencia de muchas startups, Pinterest no nació para atraer a usuarios expertos en tecnología. Pinterest fue creada para ser utilizada por cualquiera y por todo el mundo, sin necesidad de residir en Silicon Valley. Pero los fundadores Ben Silbermann, Evan Sharp y Paul Sciarra no se detuvieron ahí; Pinterest creció hasta convertirse en una empresa de 15.000 millones de dólares gracias a su enfoque en la construcción de la experiencia para los usuarios existentes y el desarrollo de una experiencia de medios sociales completamente única.

Al principio, Pinterest era una plataforma a la que sólo se podía acceder por invitación. La exclusividad permitió a la empresa centrarse en crear la experiencia que buscaban los usuarios; Ben Silbermann incluso llegó a ofrecer su número de teléfono personal a los usuarios para que pudieran ponerse en contacto con él día y noche sobre el sitio. Está claro que esta dedicación dio sus frutos. Pinterest sigue siendo una plataforma única (y lucrativa) que se centra en compartir, guardar y organizar intereses más que en las actualizaciones de la vida, lo que les diferencia continuamente de la competencia.

Whatsapp

WhatsApp, la popular app de mensajes de texto para que la gente se conecte en distintas partes del mundo, empezó en un lugar inesperado: el gimnasio. Cuando el fundador de Whatsapp, Jan Koum, se sintió frustrado por perder llamadas mientras estaba en el gimnasio, él y su cofundador Brian Acton desarrollaron WhatsApp para permitir a los usuarios indicar cuándo están disponibles para recibir llamadas actualizando su «estado».

Lo que hace especialmente singular la historia de Whatsapp es que sus fundadores no se propusieron crear una empresa y, desde luego, nunca esperaron iniciar un negocio que tuviera el éxito que ha alcanzado. Simplemente querían crear un producto útil para los consumidores, que se convirtió en un negocio de 5.500 millones de dólares.