El financiamiento entregado por las entidades bancarias privadas para la compra de vehículos cerró el 2019 con un resultado positivo y se recuperó tras las magras cifras reportadas en el 2018, informó la Asociación Automotriz del Perú (AAP).
De acuerdo al gremio empresarial, al término del año pasado, el saldo de créditos vehiculares totalizó en 1.840 millones de soles, evidenciando un incremento de 6,7% respecto al 2018, cuando el resultado final fue negativo en -6,58%.
El principal elemento de la compra de vehículos fue que la confianza del consumidor se mostró resistente durante la mayor parte del año anterior, e incluso revelaron una mejoría a partir del tercer trimestre.
Gracias a ello, refirió la AAP, la adquisición de vehículos (y el consumo privado en general) lograron obtener mejores resultados.
De otro lado, el gremio automotor refirió que las condiciones financieras también han sido propicias para el aumento del crédito vehicular.
“Durante el 2019, el ente monetario recortó en dos oportunidades su tasa de interés de referencia, de 2,75% a 2,50% en agosto y de 2,50% a 2,25% en noviembre pasado», señaló la AAP.
En tanto, la tasa de interés promedio en soles de los créditos vehiculares pasó de 11,02% a 10,54% en el 2019.
De igual manera, la fuerte competencia en el mercado entre las diversas entidades financieras también ha permitido que las tasas de interés disminuyan.
Según el portal La República, al analizar el índice de ‘solarización’, que mide la porción de la cartera vehicular que se encuentra en soles, el gremio refirió que éste se ubicó en 87,75% al finalizar diciembre de 2019.
De esta manera, anotó un aumento de 1,12% frente a similar mes de 2018.
Es importante señalar que el nivel de solarización reportado al término del año pasado ha sido el máximo histórico alcanzando por dicha variable.
En ese sentido, la AAP destaca la importancia de que el mayor porcentaje del portafolio crediticio se otorgue en soles.
Del mismo modo, una lectura adicional a dicho resultado es que los usuarios financieros peruanos cada vez son más conscientes respecto a las ventajas de asumir deudas en la moneda en la que reciben sus ingresos.