A inicios de año se conoció una importante compra que había hecho Seafrost, compañía piurana de congelados y conservas. Según el anuncio, Seafrost compró una planta para procesar atún a la empresa conservera Las Américas S.A, compañía que es parte de la firma panameña Tri Marine International SRL.
Infomercado conversó con Baruch Byrne Antezana, gerente de operaciones de Seafrost, quien nos explica la actual situación de su sector y cómo manejan su actividad en la provincia de Paita.
¿Cuál es el mercado donde están mejor posicionados?
Cada producto tiene su propio mercado. Vendemos mucho a Asia, Europa y Norteamérica. Todo lo que es pota seca o materias primas va a Asia y Corea; la pota con valor agregado va a Europa. Otros recursos como el calamar, pulpo y concha de abanico se vende en Europa y parte de Estados Unidos; el perico se exporta a Estados a Unidos y la merluza a Europa.
Tienen tres unidades de producción: conservas, congelados y harina de pescado, pero la nueva planta reforzará el giro de las conservas…
Seafrost es una empresa congeladora, hemos nacido congelando, pero depender del mar es muy complicado. Por ello, entramos a procesar conservas porque las especies como el atún te permiten aprovechar la fortaleza de la planta que es el frío. De almacenar 4 mil toneladas, en la planta actual, pasaremos a tener una capacidad de almacenamiento de 8 mil toneladas, solamente para atún. Con las otras especies hidrobiológicas no se puede hacer pues dependes mucho de la estacionalidad de la especie y la compra se hace en el día. Hoy nos hemos consolidado en el negocio de las conservas y somos los primeros en el país.
¿La nueva planta ayudará a su consolidación en el mercado nacional de conservas?
En tamaño es casi lo mismo a la planta que tenemos actualmente. Es una inversión importante y arriesgada, pero creemos que esta inversión consolidará nuestro posicionamiento en el mercado del atún, a nivel nacional. Uno de los problemas que hemos tenido con el atún es que pese a la calidad con la que producimos y pese a tener diversas certificaciones internacionales, vendemos muy poco en el país porque competimos con Ecuador y Asia, cuyos empresarios tienen ventajas comerciales que nosotros no tenemos.
¿Qué tipo de ventajas?
Ecuador tiene un drawback, es decir, un incentivo arancelario. Por cada caja que le exporta al Perú recibe un incentivo que su mismo gobierno le brinda, que puede oscilar entre 1 y 2 dólares. El impacto de esa ventaja se puede comparar con lo que yo produzco, por ejemplo, por cada caja de atún que uno produce, en promedio, gano 3 dólares. Además, Ecuador vende el petróleo a 1 dólar a sus barcos atuneros; en Perú nos cuesta 3.20 dólares. Entonces la competencia no es pareja.
En ese escenario, ¿cómo negocian con las marcas peruanas?
En el atún, todos los costos son estándar: materia prima, envase, gastos operativos. Ese drawback del gobierno ecuatoriano, un subsidio a su productor, nos golpea porque cuando negociamos con Gloria, Fanny (Molitalia), Florida u otra marca peruana nos cuestionan el precio porque Ecuador les vende más barato. Ecuador sabe que por esos tres dólares de diferencia yo no puedo competir. Al final, nos compran cuando hay quiebres de stock.
¿Con Asia funciona igual?
En Tailandia, solo entrando a Internet, sabes que hay explotación laboral; además, nosotros respetamos las convenciones del mar y ellos no. El atún les cuesta allá la mitad de lo que cuesta acá y los estándares de calidad son mucho más bajos.
Por ello, los mercados europeo y norteamericano son sus destinos habituales…
Subsistimos vendiendo el 70% de nuestra producción afuera, donde sí podemos competir por precio porque en Europa sí se preocupan por la certificación. Te puedo vender un atún que tiene trazabilidad; además, tengo dos certificaciones de responsabilidad social, dos de calidad, una de «Dolphin Save». Acá no le damos mucha importancia a eso, pero en Europa sí. Allá no se fijan mucho en los tres dólares de diferencia, simplemente quieren tener lo que necesitan.
¿Qué tipo de particularidades existen en los certificados que requiere el mercado europeo?
Básicamente tenemos las certificaciones BRC (certificación de seguridad alimentaria), CFS (estándar de pesca de captura), Dolphin Save (preservación de los delfines en la pesca). Los europeos hoy nos piden un certificado que les asegure que el atún ha sido pescado sin medios electrónicos.
¿Cómo se pesca el atún?
Hay dos formas. La primera es que el barco atunero tienen unos castillos inmensos y, arriba del barco, va un observador con unos binoculares o en un helicóptero (para los barcos más grandes). Desde la altura detectan manchas blancas o burbujas en el mar a lo que llaman ‘brisas’. En ese lugar es donde el atún está comiendo y van a pesca. La segunda forma es que se arrojan despojos en el mar para hacer sombra, el alimento se pega en la sombra (que tienen un aparato llamado «sonar»), el atún se acerca a la sombra y el «sonar» avisa del cardumen. Algunas organizaciones creen que esta segunda opción no es la adecuada para la pesca de atún y, por ello no te compran. Esto me obliga a separar la compra del atún cuando llega a la planta. Con el escándalo de las conservas chinas de caballa (noviembre 2017), los controles se acrecentaron.
¿Cuánta es la producción adicional que te permitirá la nueva planta?
En la planta de la zona industrial de Paita tenemos licencia para producir 750 cajas turnos. En la nueva planta se tiene 26 mil cajas turno. En la planta actual proceso 12 mil toneladas de atún al año; en la nueva planta debo producir, mínimo, 25 mil. ¿Cuál es la meta? El Perú tiene un mercado de 3 millones y medio de cajas, hoy Seafrost produce 200 mil, pero con la nueva planta llegaríamos a las 2 millones de cajas. La idea es abastecer el mercado peruano a exclusividad.
A mediados del año pasado, el sector pesquero cayó 27% por la menor captura de especies. ¿Les afectó esta caída?
Afectó, pero una de las fortalezas de Seafrost, que a la vez es una debilidad, es que estamos derivando a la pesca más estable como el atún. No he parado ni un solo día en el procesamiento porque tengo almacenado el atún; trabajamos también langostinos, que lo importamos, lo almacenamos, y cada día saco 20 toneladas para procesar. No dejo de procesar, baja la producción pero la planta no para. Pese a las malas cifras del sector, a nosotros no nos afectó,nos fue bien, pudo ser mejor. Otras plantas sí la han pasado mal porque dependen de un solo producto: la pota.
¿Cómo afrontan las acusaciones continuas de contaminación del mar?
Eso es verdad pero hay que analizar la responsabilidad compartida. Estamos en una zona industrial y existen 25 plantas. Ninguna tiene tenemos desagüe. La municipalidad y la EPS Grau deberían brindar el servicio de desagüe, pero no te lo brindan. Por normativa, la planta es la responsable de la disposición final de sus vertimientos.
Entonces, ¿qué están están haciendo?
Cada planta está diseñando su forma de tratar ese problema, de acuerdo a su criterio. Nosotros hemos invertido bastante en una planta de tratamiento que cumple con los límites que nos exigen las autoridades. Asimismo, tenemos autorización para el reuso de nuestras aguas de tratamiento para forestación de especies nativas como algarrobo y faique. Este permiso nos ha permitido concesionar 40 hectáreas de terrenos con Ceticos-Paita para que el agua de vertimiento sea usada en ese campo donde estamos generando un bosque. Pero no hay una solución conjunta.
¿En cuánto tiempo se prevé que haya un bosque en la zona industrial de Paita?
Seafrost es una empresa que, de alguna manera, tiene los recursos para hacerlo, nos gusta hacer bien las cosas y no tomamos decisiones engañar o darle vuelta a la norma. Seafrost podría votar el agua y se soluciona la vida, pero hemos preferido realizar un convenio con Serfor, compramos plantones, los sembramos y cuidados, y en cinco años vamos a tener un bosque. Sin embargo, la mayoría de plantas no tienen los recursos, y no se han dedicado a ver el tratamiento de sus aguas residuales porque no son son expertos en ello. Entonces, en la noche, algunas botan el agua al mar, lo llevan en cisternas y lo botan en cualquier lado, entre otras malas prácticas.
Hemos visto que han intentado colocar una planta de reuso de su agua industrial dentro la empresa. ¿está avanzando este proyecto?
Unos expertos brasileros están trabajando en nuestra planta de procesos. Seafrost consume mil metros cúbicos de agua diarios, de esa cantidad, podría reprocesar 700 (la diferencia se evapora). Los brasileros me propusieron potabilizar el agua y me la venderían al mismo precio que la EPS Grau. ¿Qué ahorraría? El reproceso del agua y la compra del mismo recurso. Otra ventaja es que dejo la planta de tratamiento en los expertos brasileros. La propuesta está en pruebas. Si funciona, sería la solución perfecta y Seafrost contrinuiría con cuidar al agua.
Además de lo comentado, ustedes siempre han pedido que el estado proteja la industria conservera nacional…
Es verdad. No es posible que la empresa peruana tenga que competir con productos subsidiados del extranjero. No queremos que nos regalen nada solo que nos pongan a competir en igualdad de condiciones. Si existe una ley Antidumping, el estado debe aplicarle al competidor extranjero. El gobierno peruano es bien lento y la pesca de consumo humano directo no está vista de la mejor manera.
¿Cuánto le falta desarrollar al sector conservas?
El país exporta mucha harina de pescado porque el sector de conservas aun no desarrolla como se debe. Con el 10% de lo que utiliza el sector harinero, de materia prima en toneladas, las conservas procesamos casi la mitad de lo que ellos exportan, ese es el plus que le damos a la materia prima. Si el sector harinero produce 5 millones de toneladas al año, nosotros hacemos medio millón de toneladas y exportamos la mitad de lo que ellos exportan en harina porque en la conserva el valor agregado es muy importante.
A futuro, ¿qué otras proyecciones tiene Seafrost?
Ya hemos hecho la inversión en la nueva planta, ahora estamos trabajando en ponerla operativa. Ahora viene una etapa complicada porque comprar es muchas veces más sencillo que hacer rentable algo, pero creo que nos va a ir bien, nos estamos consolidando, está posicionando como nombre y marca. Tenemos una tienda, somos la única planta que tiene una tienda de sus productos y no vendo poco (2000 oles diarios) y la marca se hace conocida, invertir en situaciones difíciles cuando la industria del consumo humano directo está en crisis, pero apostamos por el país y el sector, el gobierno tiene mucho que hacer.
Datos de la empresa
- Es una empresa líder en pesca para procesar productos de consumo humano directo y es líder en exportaciones.
- Su capital es de inversionistas italianos.
- La empresa tiene seis naves de procesos de materias primas, productos terminados que va directamente a supermercados y productos diversos.
- Procesan cefalópodos, crustáceos, langostinos, pota, calamar, pulpo, anchoveta, atún, entre otros.
- La empresa actual se encuentra en la zona industrial de Paita (carretera hacia Colán). La nueva planta se ubica en la zona de Paita Baja.
- La compañía atiende a 15 marcas a nivel nacional e internacional, entre ellas Fanny (Molitalia), Gloria, Marinero (Yichang), siendo su primer cliente en términos de maquila la cadena alemana de supermercados Aldi. La idea es, con la nueva planta, ampliar su portafolio de marcas a unas 20 en el corto o mediano plazo.