El Servicio Nacional de Capacitación para la Industria de la Construcción (Sencico), entidad adscrita al Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento (MVCS), está en la mira por investigaciones de corrupción. Dentro de «negocios bajo la mesa» estaría implicada la empresaria Sara Goray.
Según el dominical Cuarto Poder, Goray habría intentado vender al Estado, mediante su empresa Marka Group, un terreno en la región Piura para que Sencico construya un local ahí.
Sencico y sus miras de ampliación
Sencico tiene como principal objetivo dar educación superior para los interesados en el sector construcción. Carreras técnicas cómo administración de obras de construcción civil, diseño de interiores, entre otras.
No obstante, el problema que tenía en su filial Piura -desde el 2019- es que el local estaba ‘quedando chico’ para los trabajadores que tenía.
Por ello, Sencico informó al Gobierno de turno que se necesitaba comprar un terreno y se aprobaron S/20 millones para dicho pedido en el 2020. Así lo relató el gerente de Sencico, César Hidalgo, a Cuarto Poder.
El trato bajo la mesa
El monto saldría de la venta ficticia por S/ 18 millones, donde Sencico le daría dicho monto a Sara Goray por las 2 hectáreas de un terreno de 50 hectáreas que tenía en Piura y que cedió al Estado peruano.
Una vez que haya pago dicho monto, se le descontaría los impuestos a favor de la empresaria y la diferencia ella lo entregaría en efectivo a Salatiel Marrufo.
“Ella le comentó que tenía un terreno en Piura de 50 hectáreas. Y que ella quería donar al Ministerio de Vivienda 2 hectáreas (…) para que construyan un local de Sencico y pueda darle más valor económico a su terreno”, relató Marrufo.
¿Dónde queda el terreno y cuánto vale?
En octubre del 2021, Marka Group logró copar el directorio del Fondo Mivivienda, entidad también adscrita al Ministerio de Vivienda. De los cinco directores, la empresaria colocó a tres y obtuvo la aprobación de sus proyectos.
Ya para abril del 2022, Sara Goray logró colocar a la máxima autoridad de una entidad vital para registrar propiedades, la Superintendencia Nacional de Registros Públicos (Sunarp).
La empresaria habría pagado las coimas y la “ayuda” fue dejarla copar el directorio del Fondo Mivivienda, como ya se mencionó anteriormente, de esta manera, firmó el convenio que le permitió tener financiamiento para construir y vender vivienda para los más necesitados en diferentes regiones.
Uno de esos proyectos debía desarrollarse precisamente en el terreno de Piura, donde actualmente otra empresa ya construye vivienda social. No se sabe cuánto dinero vale, pero son 50 héctareas que posee la empresaria Sara Goray.