La clasificadora Apoyo & Asociados brindó una perspectiva positiva para la estatal Petroperú ante el inicio de las operaciones de la Nueva Refinería de Talara (NRT). La empresa indicó que la puesta en marcha de proyecto permitirá incrementar sus márgenes de refino, flexibilizar la estructura de costos y estabilizar los flujos operativos.
El informe elaborado por la clasificadora resalta que la operatividad de la NRT brindará la suficiente liquidez para amortizar la deuda contraída en los últimos años para asumir los sobrecostes de su construcción. En este sentido, se prevé la reducción de apoyo por parte del Gobierno.
Petroperú producirá diésel y gasolinas con menos de 50 ppm de azufre, lo que aumentará la carga de la unidad primaria. Además, se podrá procesar crudos de mayor realización económica (crudos pesados como los provenientes de la selva peruana) y optimizar la producción de productos de mayor valor económico, “a partir de la estabilización de todas sus plantas durante el primer trimestre del 2023″.
Sobre este punto coincide con lo anticipado por el expresidente de Petroperú, Humberto Campodónico, quién afirmo que una vez que la refinería opere al 100%, los créditos solicitados para cubrir la demanda de combustibles en el Perú disminuiría.
La clasificadora reconoce dos fortalezas que permitirán la recuperación financiera de la empresa estatal: la devolución de lotes y la escasa competencia. El regreso al upstream (lotes propios) posicionará a Petroperú en un lugar estratégico dentro del negocio de hidrocarburos, con una nueva una red de distribución a través de terminales y plantas de ventas.
“Estos activos le permiten tener acceso a mayores y mejores fuentes de materia prima en términos de costos, generar sinergias entre sus operaciones, así como cercanía a sus clientes”, señala el informe.
A esto se suma que la estatal concentrará el 51,8% de la capacidad de refino del país luego de la puesta en operación de la NRT, por lo que reduce la probabilidad de tener competencia de nuevas refinerías.
Por último, el informe resalta la urgencia de un plan de reestructuración para reforzar su gobernanza y sostenibilidad financiera.