Petroperú ha anunciado que la Unidad de Flexicoking (FCK), una de las piezas clave de su refinería en Talara, enfrenta problemas operativos y quedará inactiva por aproximadamente 90 días, a partir del 30 de marzo.
¿Qué pasó?
Según indicó la compañía en un comunicado, la unidad FCK ha sufrido dificultades desde el 8 de febrero, y la interrupción total de las operaciones del complejo de refinación ocurrió el 1 de marzo debido a una falla en el Sistema Eléctrico Interconectado Nacional (SEIN).
Por ello, la unidad de FCK ha entrado en una fase de parada para realizar labores de inspección y reparación durante el mencionado período de tiempo.
Este período contempla además las maniobras necesarias para reanudar las operaciones con el objetivo de asegurar su continuidad y fiabilidad.
Refinería de Talara
A pesar de esta contingencia, la refinería de Talara continúa produciendo combustibles a un 76% de su capacidad de producción, tales como:
- Turbo A-1
- Diésel
- Gasolina
- GLP
- Residuales
La empresa asegura que no existe riesgo de desabastecimiento en el suministro de combustibles y que su participación en el mercado local de derivados del petróleo es del 27%.
Es importante resaltar que, hasta el momento, solo la unidad de Flexicoking se encuentra fuera de servicio, mientras que las otras 15 plantas de proceso y auxiliares permanecen operativas. Es importante destacar que la unidad de FCK es crucial para la rentabilidad de la refinería, ya que permite el procesamiento de los residuos de otras plantas.
La nueva refinería de Talara fue construida para aumentar la capacidad de producción de 60,000 a 95,000 barriles diarios de combustibles y fue inaugurada en diciembre pasado.
Consecuencias de las operaciones paralizadas
Por otro lado, César Gutiérrez, expresidente de Petroperú, señala que la desconexión de la refinería del SEIN podría indicar que la unidad de cogeneración eléctrica, que debería abastecer completamente a la planta, podría no estar funcionando.
Gutiérrez advierte que la inactividad de la unidad FCK resultará en un aumento del 30% en la producción de residuos, lo que podría generar pérdidas operativas, ya que el producto se vende entre un 15% y un 30% por debajo del costo del insumo.
Estas circunstancias podrían llevar a una disminución significativa de los márgenes de ganancia por el proceso de refinación, lo que podría traducirse en pérdidas desde el nivel de utilidades brutas, como sucedió en 2023.