El final de carrera hacía la alcaldía de Lima tiene un ambiente hípico. En pocas horas sabremos si se mantiene la tendencia y el candidato de Renovación Popular se impone sobre la carta de Podemos Perú.
Este hecho, sumado los resultados en regiones, me lleva a pensar lo siguiente: si Estados Unidos es el país de las oportunidades, Perú es el país de las «segundas oportunidades»:
- Rafael López Aliaga luego de haber perdido la elección presidencial, en su primera postulación, tendrá la oportunidad de ejercer un cargo público, tras su segunda postulación: ser alcalde de la capital del Perú. ¿Si se confirman los datos de la ONPE, hasta cuándo durará como alcalde de Lima si parece que volverá a tentar la presidencia como lo dijo en noviembre del 2021, aunque luego se desdijo en setiembre del 2022?
- Reynaldo Hilbck Guzmán podría tener una segunda oportunidad de gobernar a la región Piura. Si gana la segunda vuelta, ¿podrá quitarse la mochila de piedras de la inundación del 2017?
- Santiago Paz tendrá una segunda oportunidad de tentar la gobernación de Piura. Si logra derrotar a Hilbck, ¿le alcanzarán los cuatro años para hacer una «región para todos»?
- César Acuña será, por segunda vez, el gobernador regional de La Libertad (No hay que olvidar que fue congresista y alcalde). A pesar de sus últimos escándalos de plagios y declaraciones desafortunadas, más de un tercio de los liberteños lo quisieron de vuelta. Cuando culmine su gestión tendrá 74 años, ¿volverá a tentar el sillón presidencial?
- Joaquín Ramírez, acusado de delitos relacionado al lavado de activos, tendrá una segunda oportunidad de ser funcionario público elegido por voto popular: ser alcalde de Cajamarca. Aunque el JNE tendrá la última palabra por el JEE de su región declaró improcedente su candidatura.
Y el recuento de segunda oportunidades puede seguir. Al parecer los peruanos creemos en la redención de los políticos. Si Alan García tuvo su segunda oportunidad luego de destrozar el país…
Bienvenidos al país de las segundas oportunidades.