El Ministerio de Trabajo publicó la nueva Ley de Teletrabajo cuyo texto final cae en algunas contradicciones. Diversos expertos coinciden en que la norma podría ser calificada de ilegal al obligar a los empleadores asumir al menos uno de los costos de conectividad, como equipos, internet o electricidad.
Esta disposición contraviene lo que la misma ley señala con respecto a la posibilidad de que trabajador y empleador pactaran para no asumir los costos de teletrabajo.
En este punto, el socio del estudio Vinatea y Toyama, Jorge Toyama, indica que el Ministerio de Trabajo debe corregir este punto si no quiere que se declare como ilegal:
«Hay trabajadores que están dispuestos a no recibir por internet o electricidad en la medida que puedan teletrabajar porque hay un ahorro en el costo de transporte y alimentación», señaló Toyama a Gestión.
Otro punto de la ley que genera controversia es el referido al lugar de teletrabajo. De acuerdo al texto, el empleador debe aceptar la ubicación que se adjudique como oficina sin importar que este no cumpla con los requisitos mínimos que den viabilidad al cumplimiento de las funciones del trabajador.
Pese a ello, el empleador está obligado a asumir los riesgos de conectividad y fallas técnicos que se puedan presentar. Para la socia del estudio DLA Piper, Cecilia Guzmán-Barrón, la norma es rígida y excesivamente proteccionista en este aspecto:
«Digamos que un trabajador decide hacer teletrabajo en una zona del Perú con baja conectividad. Si uno de los días que labora en ese lugar se le va la señal, el empleador asume el riesgo. Y, aun si quisiera asegurarse de las condiciones del lugar, no podría hacerlo si el trabajador no se lo permite», explicó Guzmán-Barrón.