Neuralink, la compañía fundada por Elon Musk, dio un nuevo paso en el campo de la tecnología de implantes cerebrales. En esta ocasión, su segundo paciente ha comenzado a utilizar su implante para diseñar objetos en 3D, mostrando el potencial innovador de esta tecnología. Aquí los detalles.
¿Cuáles son los beneficios del implante?
El paciente, conocido solo por su nombre de pila Alex, recibió el implante cerebral hace un mes. Antes de sufrir una lesión en la médula espinal, Alex trabajaba como técnico automotriz, realizando reparaciones y ajustes en vehículos y maquinaria pesada.
Desde la cirugía, ha sido capaz de controlar dispositivos electrónicos con su mente, lo que le permite jugar videojuegos y utilizar software de diseño asistido por computadora (CAD) para crear modelos tridimensionales.
¿Cómo responde Neuralink?
Según Neuralink, la intervención quirúrgica fue exitosa y Alex fue dado de alta al día siguiente. Su recuperación fue positiva, y comenzó a experimentar mejoras significativas en su capacidad para interactuar con distintos programas:
“Estamos trabajando con Alex para aumentar su productividad con Link, al asignar los movimientos previstos a diferentes tipos de clics del ratón, lo que amplía la cantidad de controles que tiene y le permite cambiar rápidamente entre varios modos en el software CAD (por ejemplo, hacer zoom, desplazamiento, panorámica, clic y arrastre)”, explica el comunicado publicado el miércoles.
Un ejemplo notable es la creación de un soporte personalizado para su cargador Neuralink. Este fue diseñado en 3D e integrado en su configuración.
¿Cuáles han sido las mejoras a comparación del primer paciente?
A diferencia del primer paciente (Noland Arbaugh, quien recibió el implante en enero) el segundo paciente no experimentó problemas con la retracción del hilo del implante.
En el caso de Arbaugh, los cables diminutos del dispositivo se retrajeron después de la cirugía, lo que llevó a una reducción en la eficacia de los electrodos. Neuralink tomó medidas para evitar estos problemas en el segundo paciente. Para ello, redujo el movimiento cerebral durante la operación y minimizó el espacio entre el implante y la superficie cerebral.
A pesar de las complicaciones con el primer paciente, este también demostró ser capaz de realizar una variedad de tareas mediante control mental:
- Jugar videojuegos.
- Navegar por internet.
- Publicar en redes sociales.
- Mover el cursor del ordenador portátil.
Estos avances subrayan el potencial de la tecnología para transformar la vida de personas con parálisis y otras condiciones similares.