Desde pequeña, Ximena Delgado soñaba con tener su propio negocio, un deseo que surgía por inspiración en su padre.
A lo largo de los años, Ximena se esforzó por ganar experiencia y conocimientos que la prepararan para iniciar un negocio, Sin embargo, fue una conversación con un amigo cercano lo que le mostró una oportunidad para fusionar el amor por la comida con su anhelo de emprender.
Es así como nace King Kronuts, una marca que combina creatividad y estrategias en cada uno de sus productos.
Diez años después de su creación, King Kronuts continúa consolidado como un negocio exitoso, con franquicias tanto en Perú como en Chile.
Ximena Delgado
Desde pequeña, Ximena Delgado creció en un ambiente emprendedor. Su padre, un hombre sin jefes, se convirtió en su modelo a seguir y fue quien la inspiró a construir su propio camino. Sin embargo, su infancia no fue fácil, pues el bullying en el colegio la llevó a dudar de sus capacidades, según lo comentó en el podcast de Essika Morales. Pero estas experiencias también alimentaron su determinación para alcanzar sus metas.
Desde sus años escolares, Ximena tenía claro su plan, el cual sería estudiar Administración para adquirir el conocimiento necesario para liderar un negocio.
Al graduarse, ingresó a la Universidad del Pacífico, donde consolidó sus bases académicas. Luego, decidió ganar experiencia en el mundo corporativo antes de lanzarse al emprendimiento.
Aunque su trayectoria laboral la llevó al sector textil, nunca imaginó incursionar en el rubro de alimentos y bebidas. Todo cambió cuando su amigo, el chef Rodrigo Villanueva, graduado de Le Cordon Bleu con una maestría en Italia, le presentó un producto innovador: los cronuts.
Este alimento creado en Nueva York en 2013, era una mezcla entre croissant y donut. Aunque inicialmente Rodrigo no pensaba comercializarlos, Ximena vio en ellos una oportunidad única y lo convenció de ingresar juntos al mercado.
Inicios de King Kronuts
Es así como Rodrigo pasó meses perfeccionando la receta, y el 15 de noviembre de 2014 nació King Kronuts. Empezaron produciendo en la cocina de Rodrigo, con Ximena repartiendo los pedidos después de su trabajo. Inicialmente, las ventas se hacían por Facebook, especialmente durante festividades como el Día de la Madre o el Día del Padre.
El inicio no fue fácil. Ximena y Rodrigo hicieron una lista del equipo necesario y solicitaron un préstamo al padre de Ximena. Sin embargo, él exigió un plan de negocios que demostrara la viabilidad del proyecto.
Durante un año, el negocio operó desde casa, funcionando bajo pedido y entrega por delivery. Con apenas tres personas en el equipo, Ximena desempeñó diferentes roles como contadora, community manager, analista de costos y hasta chef.
Con el tiempo lograron posicionarse en puntos de venta como cafés y restaurantes, pero pronto notaron que la calidad del producto no siempre se mantenía. Este aprendizaje los motivó a buscar un mayor control sobre su marca.
Sin embargo, todo cambió, cuando Coca-Cola los contrató para un evento corporativo solicitando 500 cronuts. Este pedido marcó un logro para King Kronuts que continuaba como un pequeño emprendimiento desde casa.
Tiempo después y gracias al posicionamiento de su innovador proyecto, ingresaron a una feria en el Jockey Plaza, donde operaron desde un módulo pequeño mientras seguían produciendo en la casa de Villanueva.
Tras tener una gran acogida en el Jockey, lograron abrir su primer local en Lince en diciembre de 2015. Funcionando primero como planta de producción, sin embargo, la alta demanda los obligó a habilitar una zona con mesas para atender al público.
El crecimiento del negocio los llevó a transformar su propuesta inicial de un módulo especializado en cronuts a cafeterías completas que ofrecen desayunos, almuerzos y cenas.
King Kronuts: Expansión y desafíos
En 2017, King Kronuts ya contaba con un menú diverso, el cual incluía opciones saladas, dulces, bebidas, helados y una planta de producción. Además, firmaron su primera franquicia y su servicio de delivery se amplió de tres a catorce distritos.
Es así como el éxito del negocio radica en la estandarización de procesos, lograda gracias a su planta de producción. Esto garantiza que cada producto mantenga la misma calidad en todos los locales, optimizando costos y resultados.
Para 2019, King Kronuts ya contaba con tres locales en operación, por lo que decidió abrir una sucursal en Plaza San Miguel, financiada con un préstamo de 120,000 dólares. Sin embargo, la pandemia en 2020 los obligó a cerrar locales.
Es así como buscaron la manera de reinventarse. En pocos meses se adaptaron a operar únicamente por delivery, pese a que King Kronuts ya no presentaba como principal modelo de negocio este servicio.
Consolidación y proyecciones
En 2023, King Kronuts logró consolidar su negocio con la introducción de microfranquicias en Perú y Chile. Es así como en Santiago, un grupo empresarial firmó un contrato de 10 años para abrir 10 módulos en centros comerciales, respaldado por una planta de producción local.
Ese mismo año, Ximena Delgado decidió lanzar un podcast llamado «Mentores Emprendedores», inspirado en sugerencias de sus seguidores. Así como este proyecto, junto con un blog y redes sociales que suman más de 260,000 seguidores, se convirtieron en un canal para compartir sus aprendizajes y fortalezas, tanto de la marca como su crecimiento empresarial.
Para 2024, King Kronuts cuenta con cinco locales en Lima, ubicados en Miraflores, Plaza San Miguel, La Molina y Plaza Norte, además de una planta de producción de 300 m² que produce 1,000 cronuts diarias en 24 sabores artesanales.
Con 10 años en el rubro de alimentos, King Kronuts se consolidó como líder en su categoría y se prepara para expandirse aún más con franquicias tanto en Perú como en el extranjero.