A través de un comunicado, Gasnorp anunció el reinició de la construcción del gasoducto en la provincia de Sechura. Este gasoducto forma parte del sistema de distribución de gas natural en la región Piura.
Cabe recordar que el pasado 14 de diciembre del 2021, las labores de Gasnorp fueron detenidas debido a los hechos de violencia contra el personal y la maquinaria desplegada en varios frentes de trabajo en Sechura.
Esta paralización, que se prolongó por tres meses, generó retrasos para la llegada del suministro de gas natural a esta provincia. Según la empresa, este proyecto beneficiará a 10,000 sechuranos.
Desde la fecha de la paralización, Gasnorp asegura que participó en las convocatorias de las autoridades regionales y nacionales para abordar este perjuicio a la masificación de gas natural y para encontrar solución a las demandas expuestas por la población.
Además, ha mantenido reuniones informativas con los interesados, incluyendo a las autoridades, comuneros y la propia población de los caseríos de Chusis y Miramar.
Denuncian agresión
Desde el 21 de marzo del 2022, para garantizar la integridad de los trabajadores y la continuidad de las obras, Gasnorp solicitó a la Policía Nacional del Perú para que acompañe las labores de construcción de la infraestructura.
Sin embargo, hoy miércoles 23 de marzo, los trabajadores de Cumbra S.A., empresa contratista de Gasnorp, denunciaron que nuevamente fueron amenazados por un grupo de 50 personas mientras se encontraban en sus labores de trabajo en la zona de Ñyapato, caserío Chusis-Miramar.

En el comunicado, la empresa lamenta que «un grupo de personas ajenas a los caseríos y lideradas por el señor Henry Zavaleta, quien no representa una autoridad legítima de la población, ha actuado nuevamente en contra de la ley y atentado contra la integridad de los efectivos policiales, los trabajadores y los equipos dispuestos en la zona».
Asimismo, Gasnorp añadió que «denuncia los actos vandálicos promovidos por el señor Henry Zavaleta, así como la extorsión de otras personas propietarias de predios ubicados fuera del trazo del gasoducto, quienes, motivados intereses particulares, afectan el desarrollo de Sechura».