Félix Adriano Facundo nació en el distrito de Canchaque, en una chacra de café, y toda su vida la ha dedicado a la producción y comercialización de este grano, que identifica a la sierra piurana.
Desde la vereda de su casa, ubicada en la primera cuadra del Jirón Malecón de la ciudad de Canchaque, ya se percibe el olor a café. En su puerta reluce la marca que don Félix desea se inmortalice con el trabajo de sus herederos: Finca Canchaqueña.
Y todo empezó con el convencimiento de probar algo nuevo. Corría el año 2003 y don Félix era dueño de una pequeña bodega. De un momento se preguntó por qué no entraba al negocio del café sino conocía la producción desde que vivían en la provincia de Jaén, Cajamarca.
Se puso manos a la obra y, en un tiesto sobre pedazos de leña ardiente tostaba el café para luego molerlo en su molino artesanal. Llegó la Fiesta de San Juan y logró vender seis kilos de café. “Fue un buen negocio”, recuerda don Félix mientras trabaja separando las impurezas de los granos de café que deja el pilado.
Luego de esa primera venta, se convenció que podía vender más cantidad, “que no era difícil emprender”. Así, don Félix, decidió no vender más café en grano a bajo precio, sino tostado y molido, para obtener mayor valor y mejores ingresos.
Negocio con buen aroma
Han pasado casi veinte años desde que inició su negocio de comercialización del café. Su empresa la desarrolla en familia, con el apoyo de su esposa y sus hijos.
El dueño de Finca Canchaqueña compra el café en grano a los mejores productores de su distrito. Luego, inicia el proceso del pilado, selección, tostado y molido. Finalmente lo envasa quedando listo para ser comercializado. Todo este proceso puede demorar entre ocho a 10 días.
De acuerdo con Félix Adriano, en la parte alta de Canchaque, a unos 1700 m.s.n.m. se produce el mejor café de la zona, pues un café que crece a una mayor altitud produce una taza con mayor acidez y es más aromática y gustosa. “Ese es el café que vendo porque tiene un gran aroma cuando se sirve”, afirma.
Los clientes de Finca Canchaqueña son de ciudades diversas como Chiclayo, Cajamarca, Arequipa, Lima, Sullana, Piura. Puedes encontrar café listo para pasar en presentación de 500 y 250 gramos, en empaques de aluminio con válvula y también de polietileno.
Don Félix asegura que, que la producción y los ingresos que se obtienen de café son variables, en el mejor de los casos logrando vender hasta ocho quintales por semana. Durante los meses de cosecha (mayo- setiembre) Finca Canchaqueña acopia la mayor cantidad de producción de café. En su local logra almacenar 120 quintales para los siguientes siete meses donde no hay producción de café.
Ventas y proyección
Don Félix Adriano afirma que se ha proyectado realizar dos innovaciones: lanzar un nuevo producto al mercado, así como implementar un centro de degustación del café para el turista, “en el mismo lugar donde se cosecha para que el cliente escoja su lote de café en el mismo lugar de producción”.
Para don Félix, el negoció de la comercialización del café “es incansable e interminable que se va construyendo poco a poco”.
Por ello, agrega, que le gustaría que sus familiares continúen con el negocio, brindando un exquisito café para sus paladares: “Me gustaría que esto no termine, que venga otra generación con mejores máquinas y amplíen el local. Es una cadena para rato”.
Debe saber
- Finca Canchaqueña es uno de los emprendimientos del Corredor del Alto Piura que recibe capacitación y promoción del CIPCA, Alboan y la Diputación Foral de Bizkaia.
- El local está ubicado en Jirón Malecón 110, Canchaque.
- Contacto WhatsApp: 999 028 447 – 978044009
- En Facebook: Café Finca Canchaqueña.
