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Exportaciones ilegales de oro en el Perú superan a las legales en seis países latinoamericanos

Cerca de la mitad del oro enviado al extranjero se cree que tiene un origen ilegal. Ante ello, se destaca la urgencia de implementar acciones más efectivas para resolver esta situación.
Por Valeria Crespo
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Un estudio realizado por el Instituto Peruano de Economía (IPE) reveló una preocupante realidad sobre las exportaciones ilegales de oro en el país.

Perú está exportando más oro ilegalmente que la cantidad total de oro legal exportada por seis países latinoamericanos.

El auge de la minería ilegal

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El 44% del oro exportado se considera de origen ilegal.

La minería ilegal, particularmente la relacionada con la extracción de oro, está en aumento en Perú.

Este fenómeno posicionó al país como el más vulnerable en comparación con otras naciones de la región.

A lo largo de los años, la producción de oro legal en Perú experimentó un incremento significativo, multiplicándose por siete desde el 2005 y alcanzando las 77 toneladas solo el año pasado.

¿Qué factor impulsa el incremento de las exportaciones ilegales de oro?

Si bien la producción de oro legal aumentó, la minería ilegal presenta una magnitud aún mayor.

Según el IPE, el volumen de oro ilegal exportado por Perú supera en cantidad al oro legal exportado por los seis países de Latinoamérica, incluyendo Colombia, Brasil, Ecuador, Bolivia y Venezuela.

En esa línea, Carlos Gallardo, especialista en el tema, destaca que el rápido crecimiento de la minería ilegal de oro se vio impulsado por el incremento en el precio del metal precioso.

Aunque el precio del oro experimentó mejoras significativas, el Estado peruano no logró capitalizar esta coyuntura, mientras que los mineros ilegales sí lo han hecho.

Respuesta Estatal Insuficiente

A pesar de los esfuerzos del Estado para enfrentar la minería ilegal, aún persisten numerosos desafíos.

Mecanismos como el Registro Especial de Comercializadores y Procesadores de Oro (RECPO) no han logrado aplicar filtros efectivos para garantizar la legalidad de las exportaciones.

Aproximadamente el 44% del oro exportado se estima que proviene de fuentes ilegales, lo que subraya la necesidad de medidas más eficaces para abordar este problema.