Martín Benavides, superintendente de la Sunedu, habla sobre las posibilidades de licenciamiento de la Universidad Garcilaso de la Vega y la Universidad Alas Peruanas.
La Universidad Alas Peruanas, de la que se dijo que era ‘too big to fail‘, está evaluando un plan de adecuación para pasar la fase de revisión documentaria y obtener el licenciamiento universitario.
Asimismo la Universidad Garcilaso de la Vega estaría en riesgo de no licenciarse debido a que no puede garantizar su sostenibilidad financiera en el mediano plazo. La PUCP, finalmente, tiene que entregar información para justificar los ‘bonos a la investigación’ que otorgaba a profesores durante la gestión de Marcial Rubio.
Martín Benavides, superintendente de la Sunedu, explica la situación de estas tres universidades.
¿Se puede cumplir con los estándares mínimos de calidad con las pensiones más bajas del mercado?
Bueno, se ha logrado. Hay universidades de S/300 y S/400 mensuales que ya se han licenciado. Éstas no son universidades orientadas a investigación, pero quieren cumplir con la función de ofrecer educación con una orientación profesional…
¿Hay más universidades no licenciadas que tienen problemas financieros?
Sí, claro. Además de sus finanzas, [no demuestran capacidad] de sostener el proyecto académico de la universidad ni transparencia en el manejo de sus ingresos. Son las tres cosas.
Se dijo que Alas Peruanas era demasiado grande para cerrarse, ¿cómo está su licenciamiento?
Hacer una evaluación de una universidad de 100,000 estudiantes es distinto a hacerla de una de 1,000 o de 500. Los tiempos son distinto. Alas Peruanas está actualmente con un Plan de Adecuación requerido. Ese plan tiene que ser aprobado por su consejo directivo y tiene un plazo máximo para poder ser ejecutado de cinco meses.
Lo objetivo es que en estos momentos la universidad no ha pasado su primera etapa, que es la verificación documentaria, y Sunedu le ha requerido un plan de adecuación. Tenemos entendido que esta universidad está dejando bastantes establecimientos. Son aproximadamente 47 locales y establecimientos; hay un sinceramiento de la oferta. Hasta el momento en el mercado universitario hay 850 programas que ya no se ofertan porque no cumplen con condiciones básicas de calidad.
¿Cuándo debería saberse si la Garcilaso de la Vega es licenciada o no?
En menos de un año habremos acabado el proceso. Las últimas universidades van a entrar a adecuación máximo en marzo o abril.
¿Las que no han sido licenciadas tienen opción de apelación?
Sí, pueden presentar un recurso de apelación. Lo solicitó la Orval, la UPIG y mañana [el viernes 25 de enero] entra el de la UPEIN. Los dos primeros no fueron aceptados. También ha entrado un pedido de la Universidad de Lambayeque.
Un grito casi desesperado del mercado privado ha sido derogar la Ley de Moratoria. ¿El mensaje ahora es “esperen hasta el 2020” o “compra la que acabamos de cerrar si quieres crecer”?
Eso segundo que dices es un análisis que tendrán que hacer las universidades. Nosotros no lo vamos a decir, pero ciertamente es una posibilidad. Tratar de moverse en los parámetros que están definidos por esta situación.
Fuente: SEMANAeconómica