El 31 de julio, la Asamblea Legislativa de El Salvador aprobó una reforma constitucional que permite la reelección presidencial indefinida, modifica la duración del mandato a seis años y elimina la segunda vuelta electoral.
El partido oficialista Nuevas Ideas (NI), liderado por el presidente Nayib Bukele promovió la iniciativa.
Cambios clave en la Constitución de El Salvador
La reforma modifica los artículos 75, 80, 133, 152 y 154. En el artículo 80 se elimina la sanción a quienes promuevan la reelección, mientras que el 152 habilita la postulación presidencial de quienes hayan ejercido el cargo en el período inmediato anterior.
El decreto aprobado establece que las reformas buscan “sincronizar los tiempos electorales” y reducir los costos vinculados a campañas frecuentes.
Postura del oficialismo y reacciones de la oposición
En 2024, Bukele afirmó que no veía necesaria una reforma constitucional para habilitar la reelección indefinida. Sin embargo, el partido oficialista sostiene ahora que los cambios aprobados son “impostergables e ineludibles” para garantizar la continuidad del ejercicio presidencial.
Desde la oposición, diversas voces expresaron su rechazo a la reforma y cuestionaron tanto el proceso como su legitimidad. Marcela Villatoro, diputada del partido ARENA, dijo que los legisladores «han hecho una confesión publica de matar la democracia disfrazada de legalidad».
Por su parte, la legisladora del partido opositor VAMOS, Claudia Ortiz, señaló que el oficialismo “está diciendo mentiras para hacer creer que esta reforma devuelve el poder al pueblo”, y sostuvo que el verdadero objetivo es garantizar la permanencia del partido en el poder.