Michael Kuryla nació en Miami, Estados Unidos. Se graduó como ingeniero mecánico en la Universidad de Tulane y obtuvo un MBA en la Universidad de Miami, llevando una vida llena de experiencias internacionales. Después de vivir y trabajar en varios países, su destino lo llevó a Perú en 2012, donde fue contratado por una empresa de alimentos para construir una planta de producción de IQF.
Sin embargo, su historia con el Perú se remonta a la década de 1950, cuando su abuelo trasladó a su familia a territorio nacional. Aquí, asumió el cargo de gerente general de Cerro de Pasco Minería y Petróleo, la empresa minera y petrolera más grande de la nación en ese momento. El padre de Michael tenía apenas nueve años cuando esto ocurrió. Con el paso del tiempo, forjó amistades duraderas en la Escuela para Niños de Santa María.
Michael Kuryla se estableció en La Merced, en la selva de Junín, y en 2014 conoció a Daiana Paola Milon Mayer, una ingeniera agroindustrial peruana que se convertiría en su esposa y socia en su futuro negocio. Unidos por su gusto por el buen licor, tras casarse en Miami, se mudaron a Oxapampa, la tierra natal de la familia de Daiana, donde empezaron una nueva etapa en su vida y negocios.
«Cuando fuimos a Miami para casarnos, la madre de mi pareja reconoció la voz de mi padre, ya que lo había conocido hace varios años. La madre recordó su voz de cuando era niña, alrededor de 8 años, y solía estar enamorada de los estadounidenses («gringos»). Es una historia sorprendente de cómo el destino puede conectar a las personas de maneras inesperadas, incluso después de tantos años.»
Durante su estancia en la selva peruana, Michael fundó su propia empresa de construcción, y mientras compartía con sus trabajadores, solía consumir whisky, especialmente bourbon. Este tipo de licor, hecho en su mayoría con maíz (51%), no se encontraba en Perú, lo que despertó en Michael la idea de crear un licor similar utilizando granos nacionales.
Una gran idea
Al descubrir que en Perú existen cerca de 52 tipos de maíz en comparación con los 13 que se encuentran en Estados Unidos, Michael Kuryla vio una oportunidad única. Inspirado por el maíz morado, la bebida preferida de los peruanos, y alentado por los hijos de los amigos de su padre, nació la idea de crear un whisky artesanal premium, al estilo bourbon, utilizando maíz peruano. Así, en 2017 comenzó a desarrollar la idea de un producto único que mezclara su pasión por el whisky con ingredientes locales.
Este licor innovador surgió a partir del maíz de Junín. Michael y su esposa iniciaron el proceso con pruebas caseras, utilizando un alambique artesanal construido por él mismo. Para ello, empleó acero inoxidable de un barril de cerveza de 50 litros, al cual le adaptó un condensador, una cocina y un moledor de carne, con el que molían los granos de maíz.
Michael, junto con Carlos, su mano derecha en el proyecto, jugaron un papel clave en el desarrollo de esta idea. Carlos propuso instalar una máquina para hacer el proceso más eficiente, lo que marcó un gran avance en la evolución de su producción, permitiéndoles avanzar hacia una operación más profesional. El equipo realizó aproximadamente 600 pruebas, con el objetivo de desarrollar una nueva formulación cada día.
Una noche, el padre de Michael lo llamó tarde para decirle que la idea del whisky le parecía excelente. Ese comentario lo motivó profundamente, al punto de que esa noche no pudo dormir. Y durante las siguientes dos semanas tampoco, ya que se dedicó por completo a elaborar un plan de negocios sólido. Durante ese tiempo, organizó la recaudación de fondos y coordinó los aspectos necesarios para materializar el proyecto.
La destilería Don Michael
Sin embargo, en 2018 la pareja tuvo que trasladarse a Lima, específicamente a Lurín, por motivos logísticos. Aunque este lugar les resultó atractivo, su naturaleza desértica ofreció condiciones poco favorables de almacenamiento. Especialmente para el añejamiento de las barricas, en comparación con lo que habían previsto inicialmente. Pero supieron salir adelante.
Confiado en que tenía un producto de alto valor, don Michael postuló al Fondo de Aceleración de la Innovación, impulsado por Concytec y el Banco Mundial. Su propuesta innovadora fue premiada con un aporte económico y capacitaciones que le permitieron trabajar en los requerimientos y certificaciones para lograr un Whiskey Andino, según como lo establece la normatividad y con una calidad excepcional.
“Después de aproximadamente un año, se logró obtener el resultado que estábamos buscando. Fue la refinación del destilado de la chicha de jora, junto con la mezcla de granos malteados para suavizar el sabor y la instalación de un destilador de última generación lo que le daría forma a “Black Whiskey”.
Es así que el 17 de agosto del 2018 nace Don Michael, destilería andina. El enfoque de la destilería era producir el mejor whiskey posible a partir de maíz negro andino. Esto evolucionó hasta convertirse en el primer «Whiskey Andino» del mundo llamado Black Whiskey, nombrado así por ser el grano principal de la mezcla.
Hacer whisky no es una tarea fácil, requiere mucho esfuerzo, dedicación y, sobre todo, cariño. Es uno de los procesos más complejos, y por eso, desde el principio, el objetivo fue desarrollar el mejor producto sin escatimar en ningún detalle. Mike estaba de acuerdo en que esto también resultaba costoso. Al inicio, todo el capital salió de sus propios bolsillos, ya que no había ventas debido a que el whisky necesita tiempo para añejarse. Finalmente, lograron lanzar su primer producto a fines de 2019, con buenas ventas durante la temporada navideña. Sin embargo, justo después, llegó la pandemia.
Pandemia
Debido a la baja demanda ocasionada por la pandemia, decidieron enfocarse en la producción de whiskies. Todas las ventas se redujeron a cero, sin embargo obtuvieron un permiso para continuar operando por un tiempo, lo que les permitió seguir llenando barricas y lanzar una tienda online. Aunque las ventas no fueron significativas, lograron ser de ayuda.
Esto permitió que finalmente pudieran reactivarse totalmente, junto con toda la cadena de producción detrás del proyecto. El equipo se asoció con la ingeniera Alicia Medina, investigadora principal del Programa Nacional de Maíz del Instituto Nacional de Innovación Agraria (INIA), para incorporar la nueva variedad de maíz morado INIA 601, descubierta por la investigadora cajamarquina.
Ellos se dieron cuenta, unos meses antes, de que la línea pequeña, que producía entre 300 y 1,000 unidades, solo permitía llenar unas pocas barricas al mes. A largo plazo, esa producción no era suficiente para satisfacer la demanda. Con la nueva línea de producción, ahora están llenando alrededor de 55 barricas por mes. Esto les permite proyectar un volumen suficiente para ofrecer una cantidad decente al mercado. Es así que lograron llenar aproximadamente 600 barricas por año, lo que equivale a entre 150,000 y 180,000 botellas anuales.
“Ha sido increíble porque ahora trabajamos con agricultores de Cajamarca, que tienen, gracias al INIA, un valor agregado en sus campos. Antes solo se utilizaba, básicamente, la coronta del maíz morado”, dice.
Premios
El “Black Whiskey” comenzó a recibir sus primeros galardones en el San Francisco World Spirits Competition, donde logró una medalla de bronce en 2020 y una medalla de plata en 2021. Además, obtuvo el título de ganador en el Bartender Spirit y fue incluido en el Top 10 del ranking de los mejores whiskies del mundo ese mismo año.
Sin embargo, lo que realmente catapultó a esta bebida en el ámbito internacional fue su participación en el New York World Wine & Spirit Competition 2022. Allí, “Black Whiskey” no solo ganó doble medalla de oro, consagrándose como el mejor whisky del mundo, sino que también recibió los distintivos ‘Best in Show’ y ‘Best in Class’, apareciendo en Forbes Magazine tres veces.
“Es un orgullo para nosotros recibir estos distintivos, hasta el momento hemos ganado un aproximado de 43 premios alrededor del mundo y buscamos seguir ganando, tanto con el ‘Black Whiskey’ como con nuestras otras variedades de destilados”.
Además, fue nombrado “Whiskey del Año” en el USA Spirits Ratings 2023 y consiguieron que se aprobara en el Perú la definición técnica para whiskey andino. Como último logro, obtuvo la codiciada medalla de oro (No. 9) en The Fifty Best en la categoría de Whiskeys del mundo 2024.
Ediciones limitadas
Don Michael ha sacado ediciones limitadas como el Single Barrel Whiskey, el Oxapampa Honey, y se ha expandido con el Andean Gin. Una ginebra a base de enebro, pomelo, huacatay, muña y, principalmente, la vainilla de Tarapoto. Después de más de veinte pruebas con diferentes botánicos y combinaciones, capturaron la mejor interpretación del gin peruano. Destacándolo en la alta coctelería global y posicionando al Perú en lo más alto del mundo de las bebidas premium.
Asimismo, la destilería colaboró con el club Universitario de Deportes, lanzando una edición inédita de su whisky en conmemoración del centenario del equipo. Esta edición limitada fue presentada con un packaging exclusivo, diseñado especialmente para la ocasión. El empaque incluyó arte impreso, una lata decorada con el icónico logo de la «U» y los colores característicos del equipo.
Consolidación
Para Don Michael, el 2024 se presenta como un año crucial en la búsqueda de capital para aumentar la producción de su emblemática marca Black Whiskey. El objetivo es incrementar la fabricación en su planta de Lurín a 2,000 barricas, con la expectativa de alcanzar los US$ 8 millones anuales en ventas de este destilado para el 2026.
“Ahorita estamos a full producción, pues no podemos destilar más porque tenemos un cuello de botella. Estamos llenando 600 barricas por año (aprox 150,000 botellas), pero la idea es armar una línea de producción para elaborar el doble de esa cantidad. Si sucede eso, me da la oportunidad de en tres o cuatro años facturar hasta US$ 8 millones anuales”
En cuanto a su portafolio de productos, cuenta con ocho productos: tres dentro de la línea Black Whiskey y cinco bajo la marca Andean, entre los cuales destaca el reciente lanzamiento del gin de arándanos. Actualmente, Black Whiskey representa el 60% de las ventas de la empresa, mientras que Andean contribuye con el 40% restante.
Actualidad
Actualmente, la marca tiene presencia en 14 países, destacando mercados clave como Alemania, Canadá, Estados Unidos, Japón, Taiwán y Suiza. A pesar de su éxito internacional, la destilería sigue trabajando en su expansión por Sudamérica, con visitas a países como Brasil, Chile y próximamente Ecuador. Donde evalúan el mercado para ingresar con sus productos.
En Perú, ya está presente en diversas provincias como Pasco, Cajamarca, Cuzco y Pucallpa. Además de estar en tiendas por departamento y en las barras y restaurantes más reconocidos del país, incluyendo Rafael, La Mar, Central y Maido. Michael Kuryla estima que este año la destilería cerrará con un 50% de crecimiento en ventas, impulsado por el fortalecimiento de su presencia en provincias.
La empresa ya está colaborando de la mano con PromPerú para expandir su presencia internacional, ofreciendo su aclamado whiskey en oficinas clave de ciudades como Santiago, Miami y Nueva York. Asimismo se enorgullece de haberse consolidado como la mejor destilería de Sudamérica, destacando por la calidad y originalidad de sus productos.
Además, Don Michael está comprometido con inspirar a nuevos emprendedores a incursionar en la elaboración de whiskey, aprovechando la rica diversidad de maíces y granos andinos del Perú. Este enfoque innovador no solo fortalecerá la industria nacional, sino que también contribuirá a la creciente reputación internacional del whiskey peruano.