El 33.º Encuentro Empresarial del Norte–EEN, organizado por la Cámara de Comercio de La Libertad–CCLL, culminó este viernes en Trujillo, donde alrededor de 300 inversores de la macrorregión norte del país se dieron cita para analizar el contexto macroeconómico nacional y mundial.
Durante estos 3 días que duró la cita, Infomercado pudo conversar con diferentes especialistas e invitados, entre ellos, el economista País Senior del Banco Mundial, Daniel Barco Rondan, quien explicó las implicancias del contexto internacional en el escenario económico nacional, destacando la buena labor del Banco Central de Reserva del Perú–BCR y reconoció el “buen manejo macroeconómico” peruano.
¿Cuál es su balance sobre la actividad económica mundial durante el 2022?
El 2022 se ha presentado como un año de retos en cuanto a la actividad económica mundial porque se ve la desaceleración de grandes economías mundiales, pero también porque las economías han tenido que combatir la inflación que se había venido gestando debido tanto a los paquetes de estímulos para combatir la Covid, como también por otros eventos como el conflicto entre Rusia y Ucrania, y por otros factores climatológicos.
Lo importante que hay que recalcar es que el 2023 puede ser un año más retador en ese aspecto, por eso es muy importante para el Perú que las condiciones domésticas sean más estables para poder mantener, digamos, tasas de crecimiento que estén, por lo menos, cercanas al 3%, aunque aún eso no sea lo ideal.
A propósito de ello, ¿qué opinión tiene sobre la actividad económica nacional?
Hay elementos que a la economía peruana le da resiliencia, que es, por ejemplo, el comportamiento de las exportaciones. Todas las inversiones que se han dado en el pasado, por ejemplo, en minería y en la agroindustria, están dando frutos ahora, y esto está permitiendo que el sector exportador siga creciendo y eso le está dando, todavía, un impulso; sin embargo, eso no va a durar para siempre, entonces, tenemos que trabajar para crear las condiciones para poder seguir creciendo en los siguientes años, y no solamente creciendo a las tasas que vemos hoy, sino a tasas más altas.
¿Quiere decir que el Perú tiene un espacio importante para seguir creciendo aún más?
Por supuesto, hay aspectos muy atractivos por parte del Perú. En términos de manejo de política económica, el Perú mantiene la estabilidad macro, se puede ver un manejo bastante prudente del aspecto fiscal, también se confía bastante en lo que hace el BCR para controlar la inflación y, además, el Perú tiene bastante potencial en el lado minero, agroindustrial, como en otros sectores.
Es importante generar el contexto adecuado para que se den las inversiones en estos sectores, y allí es necesario que haya un contexto en el cual haya un poco menos de incertidumbre y, sobre todo, un poco más de claridad acerca de la agenda política del futuro.
Ahora, el Perú es un país altamente dependiente del mundo y el BCR ha señalado que para el 2023 las tasas de inflación iniciarán una significativa disminución; sin embargo, usted ha dicho que el contexto mundial hacia el próximo año es de mayor incertidumbre. ¿El Perú podrá responder bien esta situación?
Para el caso del Perú lo que va afectar más, por lo menos en términos de crecimiento de las grandes potencias mundial, va afectar más a la tasa de crecimiento, no tanto a la inflación. Yo creo que se puede confiar bastante en las proyecciones del BCR. El Banco Central ha mostrado un récord impecable en cuanto a eficiencia monetaria, así es que se puede confiar en lo que ellos esperan respecto al control de la inflación.
Cuando yo hablo del contexto mundial, tiene que ver con las tasas de crecimiento y que son muy importantes para poder generar empleo, reducir la pobreza, para reducir la informalidad, y generar el bienestar en las personas.
¿Cuál es la proyección del crecimiento para el Perú al cierre del 2022?
Nosotros esperamos que la tasa de crecimiento termine en 2,5% o alrededor de esa cifra y para los siguientes dos años estimamos que va a estar en alrededor de 2,6%, es muestra que aún en un contexto adverso, tanto a nivel internacional y con algunos problemas domésticos, el Perú es bastante resiliente porque tiene varias fortalezas que hay que resaltar, como el buen manejo macroeconómico, la ventaja comparativa que tiene muy clara en algunas actividades, como en la minería y la agroindustria y tiene, además, gente que trabaja; sin embargo, esa tasa no es suficiente para generar prosperidad a futuro, para ello se necesita que el Perú crezca a una tasa de alrededor del 5%.