Este miércoles 7 de diciembre, a pocas horas de votarse la vacancia presidencial, Pedro Castillo anunció la disolución del Congreso de la República del Perú. Entonces, ¿Cuántas veces se ha cerrado el Congreso en Perú a lo largo de la historia? Aquí te lo contamos.
¿Cuántas veces se ha cerrado el Congreso de la República del Perú?
Año 1919
A lo largo de la historia, se han presentado numerosos casos similares en la política peruana. El 4 de julio de 1919, cuando la comisión del Senado aún no culminaba el conteo de los votos, Augusto B. Leguía, a la sazón candidato opositor al oficialista Partido Civil, decidió no esperar y, apoyado por la gendarmería, perpetró un golpe de Estado, disolvió el Parlamento y, de inmediato, convocó a elegir un Congreso Constituyente. ¿La razón? Quería una Constitución y una representación nacional a su medida. De hecho, solo la lista leguiista participó en aquellos comicios y, con el 100 % de congresistas afines, el 18 de enero de 1920, Leguía ya tenía una nueva Constitución.
Año 1936
El siguiente cierre del Congreso fue un tanto sui generis. En 1936 ganó las elecciones generales el doctor Luis Antonio Eguiguren, pero el dictador militar Óscar R. Benavides desconoció su triunfo bajo el fútil alegato de que los apristas —cuyo partido había sido ilegalizado— votaron por él. Lo que siguió fue insólito: en una jugada también calculada por Benavides, el Congreso que, en efecto, culminaba sus funciones en 1936, acordó autodisolverse y prolongar hasta 1939 el mandato de Benavides. Desde entonces, el autoritario general gobernó por decreto.
Año 1948
La historia nos lleva al 27 de octubre de 1948, día en el cual, otro general, Manuel Arturo Odría, le dio un golpe de Estado al doctor José Luis Bustamante y Rivero, de quien era su ministro. El Congreso fue disuelto de inmediato y arreció la persecución contra apristas y comunistas. Sin embargo, Odría quiso revestirse de legalidad y en 1950 realizó elecciones generales en las que él mismo resultó ganador, mientras que el candidato opositor, otro general, Ernesto Montagne era apresado para luego seguir el solitario camino del exilio.
De nuevo el Congreso resultante fue absolutamente adicto, esta vez, a la dictadura del militar tarmeño, cuyo mandato expiró en 1956.
Año 1962
Más adelante, el 17 julio de 1962 asistimos a un nuevo golpe de Estado y un nuevo cierre del Congreso perpetrados por los generales Ricardo Pérez Godoy y Nicolás Lindley López. Este golpe se realizó con la intención de impedir la nominación del líder del APRA Víctor Raúl Haya de la Torre a la presidencia del Perú. Al mismo tiempo, promovió para el año siguiente la del acciopopulista Fernando Belaunde Terry. A pesar de ello, la similitud que guarda la junta de 1962-1963 con la disolución congresal de estos días es que aquella convocó nuevas elecciones y entregó el poder al mencionado Fernando Belaunde el 28 de julio de 1963 luego de que este triunfara en las elecciones del 9 de junio de aquel año. En otras palabras, no se trató de una junta que aspirase a perennizarse en el poder.
Año 1968
El Congreso se cerró una vez más el 3 de octubre de 1968, cuando el general Juan Velasco Alvarado perpetró un nuevo golpe de Estado en contra de Fernando Belaunde. A diferencia de Leguía y Odría, quienes, a pesar de ser dictadores, quisieron mantener la apariencia democrática eligiendo congresos absolutamente adictos a sus respectivos regímenes, Velasco y después Francisco Morales Bermúdez gobernaron por decreto. No hubo Congreso entonces, no mantuvieron las formas republicanas. Al contrario, se ensayó, sin éxito alguno, implementar un modelo de Estado corporativo.
Año 1992
La última vez que se disolvió el Congreso en el siglo XX fue el recordado 5 de abril de 1992. En un discurso que todo el país presenció por televisión, el ingeniero Albero Fujimori Fujimori habló de disolver temporalmente el Parlamento y declaró la reorganización de las principales instituciones del Estado, entre ellas el sistema judicial, copado por el régimen fujimontesinista.
Año 2019
El 30 de septiembre de 2019, Martín Vizcarra declaró disuelto el Parlamento. Por la noche, ya el diario oficial El Peruano, en edición especial, convocaba a elecciones parlamentarias.
Vizcarra quería irse en 2020 junto con el Congreso, para ello le propuso una reforma constitucional de adelanto de elecciones. La propuesta fue repentinamente archivada por la Comisión de Constitución sin siquiera pasar por el pleno.