La Contraloría General de la República identificó dos situaciones adversas que podrían afectar el Proyecto de Modernización de la Refinería Talara, a cargo de Petroperú.
La modernización tiene como objetivo incrementar la producción diaria de petróleo de 65,000 a 95,000 barriles y procesar petróleos crudos pesados, entre otros.
La Contraloría advirtió que la paralización de la construcción de cuatro unidades de proceso a cargo de la Contratista Técnicas Reunidas retrasa la etapa de pruebas hidrostáticas, soplado de tuberías, reinstalación de tuberías, entre otras actividades.
Ello genera el riesgo de ampliaciones de plazo y sobrecostos para el proyecto, que inicialmente cuesta unos US$5 mil millones.
Retrasos implican sobrecostos
El retraso y observaciones en la entrega de áreas y en la construcción de las unidades auxiliares, a cargo de la Contratista Cobra-SCL, genera el riesgo que se presenten ampliaciones de plazo y sobrecostos para el proyecto, al no estar listas a tiempo para brindar las facilidades, servicios e insumos (vapor, aire, agua, nitrógeno y electricidad) a las unidades de proceso.
En el informe de control concurrente se advierte además que Petroperú y la Contratista TR mantienen pendiente de resolver diversas discrepancias presentadas durante la ejecución de las unidades de proceso, lo cual ocasiona retrasos y afecta el avance y culminación oportuna del proyecto.