Emprendimientos

Cárcamo Abogados: La conciliación es nuestro éxito

Por César Flores Córdova Publicado: Últ. actualización: 28 mayo, 2020 20:48
4 minutos

En Piura, el apellido Cárcamo está relacionado a los profesionales del Derecho. Aldo Cárcamo es parte de esa familia que, por décadas, han hecho de la carrera de abogado una buena marca personal.

El Estudio Cárcamo Abogados nació hace 11 años como parte de un reto que Aldo se propuso al salir de la universidad. Lima no era su prioridad. Él quería hacer empresa en Piura.

«Al egresar empiezo a trabajar con mi papa que tiene más de 40 años de experiencia. Con él aprendí mucho pues era un abogado que conocía la práctica tradicional de la profesión, es decir, se dedicaba a varias ramas del Derecho. Mi papá era experto en Derecho penal», recuerda.

Aunque Aldo logró establecer su empresa, no se ha desligado de su padre. Con él comparte clientes. Mientras su padre sigue dedicado al derecho penal, Aldo prioriza los casos corporativos y empresariales.

«Cuando empecé a ejercer la profesión, estaba muy en boga el Nuevo Código Procesal Penal y, la mayoría de abogados, se enfocaban en ello y olvidaron lo corporativo. Hoy cambió mucho esa realidad porque muchos de esos abogados han virado al derecho penal corporativo a través del Complaince», afirma.

Mercado de abogados

Como la mayoría de negocios, los primeros meses siempre son difíciles. Hay que encontrar el modelo de negocio y el personal ideal que se comprometa con la filosofía del emprendedor. Sin embargo, tal como asegura Aldo Cárcamo, la oferta de estudios de abogados en Piura está en una etapa de crecimiento, aunque predominan las firmas que vienen de Lima.

«Vienen estudios de Lima, pero siempre recomiendo apostar por lo local. En algunos casos, los estudios de la capital subcontratan a los de Piura, pero esa práctica no permite una buena atención a los clientes», señala Cárcamo.

En ese sentido, considera que «para tener una buena asesoría se debe contratar a un abogado local, un profesional que conozca la zona donde se generan los problemas, un abogado que esté cerca a la operación de la empresa y que permita reaccionar de inmediato ante alguna emergencia en la corporación».

Para Aldo Cárcamo, las inversiones que se han instalado en Piura y las que se anuncian a corto plazo fortalecen los estudios de abogados corporativos locales: «El norte es un sitio que tiene una explosión de inversiones en la agro exportación, salud, industria y comercio. Eso nos fortalece».

Hoy, el estudio de Aldo Cárcamo cuenta con seis abogados, un ingeniero industrial, un ingeniero agrónomo y una secretaria.

El Estudio Cárcamo Abogados lleva 11 años en el mundo de Derecho.

El valor de la confianza

«La confianza es lo que mejor define nuestro trabajo», afirma Aldo Cárcamo y, añade, que ese valor se refleja en la cantidad de años que algunos clientes se mantienen trabajando con su estudio.

«Buscamos siempre fidelizar a nuestros clientes. Muchos de ellos se mantienen desde hace nueve años, lo que demuestra que están contentos con el servicio que les ofrecemos», afirma. Son 12 clientes los que se mantienen con Cárcamo Abogados y pertenecen a los sectores agroexportación, industrias (bebidas), construcción y salud privada.

Aldo Cárcamo señala que su propuesta busca que los problemas legales se resuelvan en conciliación y no llevar al cliente a litigios judiciales que le hagan perder tiempo y dinero.

«El éxito de nuestro negocio es no llegar al juicio pues queremos que el cliente ahorre tiempo, dinero y malestares. Llegar a juicio es una posibilidad, pero intentamos que las partes concilien», asegura.

Cárcamos Abogados ofrece lo que Aldo denomina «Asesoría Legal Integral», es decir, reuniones planificadas con el cliente, consultoría legal, y acompañamiento continuo a las acciones que ejecutan las empresas que pueden generarle algún problema legal a futuro.

«Buscamos al ciente y le consultamos sobre sus últimas acciones en la operación para encontrar alguna falla y adelantarnos a algún problema futuro. Queremos que el cliente se sienta acompañado y, si en algún momento tiene alguna contingencia legal, pueda llegar mejor preparado a enfrentar un posible proceso judicial», explica Cárcamo.

Con respecto al pago de honorarios, Aldo comenta que, a diferencia de Lima, los clientes en Piura no pagan por hora sino por avance del caso o cuando termina un proceso judicial. «Cuando les quieres cobrar por horas se asustan», asegura.

Hay que señalar que los estudios de abogados en Lima cobrar US$ 150 por hora, en promedio. En Piura, si algún cliente acepta pagar por hora, lo máximo que pagan es US$ 80.

A futuro, Aldo espera crecer fortaleciendo la posición de la empresa en mercado legal de la zona, ampliando las áreas de práctica.